AS (Las Palmas)

“Soy un técnico de cantera que tuvo la suerte de ganar un Mundial”

- JOAQUÍN MAROTO

Vicente del Bosque cumplirá 67 años el próximo 23 de diciembre. Es el entrenador español más laureado de la historia. A España le dio un Mundial y una Eurocopa. Vicente Del Bosque

Han pasado más de siete años desde el Mundial de Sudáfrica. ¿Le cambió la vida este título?

—Mi vida no ha cambiado. Pero fue un título importante para el país y para el fútbol español. En estos años, con el respaldo de ese Mundial, nuestro deporte ha crecido, no sólo en títulos, también en instalacio­nes, en número de jugadores, en presencia de entrenador­es y futbolista­s en el extranjero... En fin, el crecimient­o ha sido espectacul­ar.

—¿Cómo es un día normal en la actual vida de Del Bosque?

—Pues tengo muchos compromiso­s y siempre hay algo que hacer. No tengo un solo día vacío, la verdad. La gran diferencia es que ahora no estoy pensando en la siguiente convocator­ia, en el próximo partido, en los rivales, en todo eso que tanto desgasta. Pero estoy encima del fútbol, claro. El fútbol es mi vida.

—¿Qué imagen le quedó grabada del Mundial?

—Ufff, son tantas que no podría quedarme con una sola. Quizás del día de la final, contra Holanda. Ver a la Reina Sofía en el vestuario, feliz y contenta mientras un señor dejaba allí la Copa, con unos guantes blancos. Verla compartien­do ese momento con nosotros fue muy emocionant­e. Y luego muchos otros instantes de los partidos y de la concentrac­ión, que por cierto fue modélica y clave del éxito.

—¿Tiene la impresión de que a cada año que pasa tiene más valor su Mundial?

—No, sobre todo porque la Selección ha entrado en una órbita que, sin fantasmada­s de ningún tipo, puede optar a otro Mundial o a otras Eurocopas. Porque hay muy buena base y una excelente Selección que pueda aspirar, con total naturalida­d, a ganar otra vez la Copa del Mundo. Eso, hace no tanto, era casi impensable. Ahora ya no, y eso es un cambio sustancial. Pero que nadie se equivoque, que lo digo con toda la cautela y sin presumir. Porque la euforia no es buena.

—No me equivoco mucho si digo que si España gana otro Mundial a usted le hará tanta ilusión como el suyo propio.

—Claro que sí. Yo soy un hombre de fútbol que sabe que la estima y el valor vienen no sólo de los comportami­entos, sino también de los títulos. Si España gana otro Mundial el fútbol saldrá aún más reforzado, y por lo tanto yo me llevaría una gran alegría.

—¿Irá a Rusia a ver algún partido de la Selección?

—No. Veré el Mundial por televisión.

—¿Ha dejado su legado Del Bosque en las seleccione­s inferiores?

—No, las seleccione­s inferiores de España hace tiempo que lo hacen muy bien. Y hay muchos artífices de eso, desde los Juan Santisteba­n, Teodoro Nieto, Mariano Moreno, Iñaki Sáez, Ufarte, Ginés Meléndez..., en fin, no quiero dejarme a nadie. El caso es que todo el mérito es de ellos. Lo que hicimos nosotros fue estar muy pendientes, muy implicados con ellos porque era nuestro deber y nuestra vocación. Nosotros no entendimos la Selección Absoluta como un mundo aparte, más bien como todo lo contrario. La entendimos como una parte del todo. Por eso hemos trabajado en coordinaci­ón con Celades, con Santi Denia, con el propio Julen Lopetegui en su momento. Y entre todos buscamos lo que nos parecía lo mejor. Nosotros hemos estado siempre muy cerca del fútbol base. Se podría decir que yo soy un entrenador de cantera que tuvo la suerte de ganar un Mundial. —Siempre ha dicho que se considera un entrenador de cantera, es verdad. ¿Pero eso le ha dado más satisfacci­ón que ganar el Mundial?

—Los diecisiete años que pasé en la cantera del Madrid fueron una etapa muy feliz en mi vida. Pensé que iba a jubilarme ahí, con los chicos. Pero los avatares del fútbol me llevaron hasta el primer equipo sin pretenderl­o. Porque en ese momento yo me sentía imprescind­ible en el trabajo con la cantera. Y lo digo con humildad, imprescind­ible en el sentido de sentirte responsabi­lizado y feliz con el trabajo, aunque luego llegan otros que lo pueden hacer mejor. En fin, no pensaba en pasar al fútbol más profesiona­l. Y al final, sucedió. En el fútbol no puedes hacer planes.

—¿Se hubiera retirado en los campos de tierra?

—Yo era un entrenador formativo, y me encantaba mi trabajo.

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain