“Intentamos solucionar el desaguisado creado”
Miguel Ángel Ramírez no niega llevar tiempo “poniéndole parches”
En la temporada más crítica de las tres que se llevan disputadas en Primera División desde el último ascenso, las cosas están saliendo mucho peor de lo imaginado, no escondiendo el presidente de los isleños su culpabilidad a la vez que espera que se pueda lograr la salvación.
Miguel Ángel Ramírez, presidente de la Unión Deportiva Las Palmas, repasó en Cadena Ser la actualidad del conjunto grancanario, especialmente la salida de Jonathan Viera.
No quería que saliera. Entiende que la marcha del canterano “es muy buena en lo económico y muy mala en lo deportivo”, porque “le hemos vendido dos veces” y estamos “en un nivel económico que nunca antes la entidad había estado, de Champions, al vender a un jugador nuestro con el mayor ingreso de su historia”. Recalcó que desde la entidad “hicimos todo lo que pudimos hacer y tuvimos a nuestro alcance para intentar retenerle, pero nos fue imposible”, lamentó.
La negociación “habría sido perfecta que se hubiera producido en enero, porque ´le habríamos vendido y tenido tiempo para sustituirle. Ahora tenemos que buscar una solución con un jugador que esté solo en el paro, pero en enero logramos parar el interés de equipos que estuvieron muy interesados en él. Nuestra postura inflexible propició que el jugador no saliera en el mercado invernal hacia el equipo chino por nuestra fuerte apuesta, pero los argumentos se nos fueron acabando hasta que no tuvimos más remedio que venderle”.
Entiende que con esta salida “la afición está dividida” puesto que “unos ven buena la operación y otros mala”, por lo que “se debe tener claro que es complicado poner de acuerdo a toda la afición y es algo que debemos asumir; desde el club tenemos la responsabilidad de tomar las decisiones necesarias para que se beneficie la entidad y en lo de Viera ha sido la menos mala”. Lo que espera es que “su ausencia nos perjudique lo menos posible” y que “otros jugadores aprovechen la oportunidad que se les abren”.
Respecto a las condiciones de la operación “no podemos hacer ningún tipo de comentario en lo referente a temas económicos pero sí que la entidad ha obtenido el rendimiento económico que quería tener”, especificó el presidente. Aunque en China se dice que la operación se cerró por 11 millones de euros, la realidad es bien distinta puesto que está cerca de los 24 millones de euros, de los que Las Palmas cobrará 18 y el resto su ex representante, Pedro Bravo, y su anterior equipo, el Estándar de Lieja, mientras que el jugador sobrará 6 millones de euros cada una de las temporadas en las que juegue en el país asiático y una prima de fichaje de 7 millones a la firma del contrato.
Viera era “la bandera de este proyecto y nunca lo hemos puesto nunca en venta y si salía era porque el jugador quiere irse y porque la entidad recibe el rendimiento económico que le corresponde. Pusimos todas pegas posible y gracias a eso obtuvimos mayores beneficios de los esperados”, manifestó el jerarca, que también reconoce que el actual Jonathan “no es el que estábamos viendo temporadas atrás”.
Jémez no quería que saliera. Del entrenador Paco Jémez confirmó que “no quería que se fuera” aunque “está haciendo un buen trabajo y aunque sabemos que es muy difícil el trabajo que le hemos encomendado estamos confiados en que lo sacará adelante porque antes estábamos a siete puntos de la salvación y ahora a dos”.
No esconde que la temporada “ha estado llena de desaciertos y lo único queda ahora es intentar salvarla como sea. Por un lado nos han venido problemas como éste y otros los nos hemos buscado nosotros con nuestras decisiones. No nos queda otra que seguir luchando y salir a competir con el equipo que se tiene. Nadie duda que se corre, se lucha y se sufre porque desde que Paco está aquí es algo que hemos echado en falta de aquí para atrás. Conoce la casa y está demostrando ser el entrenador acertado. Se ha cambiado el estado anímico y físico, y con esto no es que me esté metiendo con nadie, pero es evidente que al equipo no le alcanzaba para tener la condición necesaria para competir al más alto nivel. Lo que ahora toca es estar al lado del equipo para ver si perdemos seguir luchando y lograr la permanencia”.
Admite que en esta campaña “hemos hecho todo lo contrario a lo que pensaba y decía en lo deportivo y al final las cosas no han salido como todos queríamos. No ha funcionado casi nada y por eso estamos pasando unos apuros que ojalá al final de año podamos decir que nos salvamos y aprendamos de ellos. Se podría decir que esta campaña ‘peor imposible’ a la hora de hacer las cosas. Estoy muy descontento pero no queda otra poner todos los esfuerzos en intentar salvar el año y luego ya será tiempo de tomar las medidas que tengamos que tomar. Intentamos solucionar el desaguisado que nosotros mismos hemos creado y que llevamos tiempo poniéndole parches”, sentenció.
Es crítico “Hemos hecho todo lo contrario a lo que pensaba y decía”
J. Viera “Es una buena operación económica y muy mala en lo deportivo”