El Madrid le quiso en 1993 y jugó 109 veces con la URSS y Rusia
■ Viktor Savelyevich Onopko (Luhansk, 14-10-1969) nació en suelo ucranio pero es un histórico de la transición del fútbol soviético al ruso. Vistió 109 veces la camiseta de la URSS y de
Rusia, jugó dos Mundiales y es el cuarto en el ránking histórico tras Ignashevich,
Blokhin y Akinfeev. Mediocentro rocoso y frío como el hielo hasta que entraba en combustión (le pegó un puñetazo a Helguera en un
Oviedo-Real Madrid de 2000 y le cayeron cinco partidos), Onopko es un viejo conocido del fútbol español.
El Madrid, tras el famoso 1-3 del Spartak de Moscú en el Bernabéu en 1991
(con Radchenko, Karpin...) intentó explorar la vía rusa, más barata con la llegada de la Perestroika y el fin del corsé que impedía a los jugadores soviéticos emigrar. En 1993, tanteó a Onopko y Lediakhov. Ninguno llegó a Chamartín pero terminaron cerca. Onopko en el Oviedo y Lediakhov al Sporting.
Íntimo del malogrado Dubovsky, el Oviedo le impidió residir en Gijón (había mirado un casa allí) y como carbayón jugó 216 partidos antes de irse al Rayo en la 02-03. Volvió a Rusia, donde es perenne desde hace nueve años como segundo técnico del
CSKA, “el Madrid de Rusia”, como dice el propio Onopko... —C. A. FORJANES