Zidane despliega ante el Eibar su política de inclusión
El galo sacó a Isco, ‘Vini’ y Brahim
Zidane no pierde ocasión para reivindicar con sus actos que es un entrenador con mano izquierda. El técnico aprovechó la segunda parte del encuentro en Ipurua, con el partido ya resuelto, para dar bola a tres jugadores a los que las cosas no les terminan de ir bien este curso. Es la política inclusiva de Zidane, que quiere a todos listos para el momento de la verdad.
Isco, Vinicius y Brahim fueron los cambios elegidos para los minutos finales en Eibar. Los dos primeros entraron en el 72’; el último, en el 81’. El partido no dejó excesivas bondades de ninguno de los tres, más allá de un par de cabalgadas por la izquierda del brasileño. Pero es muestra del espíritu conciliador de Zidane, que aprovechó la oportunidad para revitalizar a tres jugadores que pasan un momento delicado.
Vinicius entró en esta convocatoria tras quedarse fuera en dos de las tres anteriores. Isco no ha vuelto a ser el que fue desde su encontronazo con Solari, precisamente hace un año en Ipurua; y Brahim simplemente no cuenta, pese a que Zidane mostró mucha predilección por él el curso pasado. No quiso salir cedido y eso ahora le pesa.
Ya lo hizo en anteriores ocasiones Zidane con otros jugadores necesitados de afecto. Así fue por ejemplo con Rodrygo ante Osasuna: el técnico le dio 19’ ante el equipo rojillo en el Bernabéu y el brasileño marcó a los 95 segundos. También Jovic recibió su dosis el pasado 30 de octubre contra el Leganés. Zidane le introdujo en el campo en el minuto 70, con el equipo blanco dominando y llegando. Fue el mejor ambiente posible para Jovic: nada más salir rozó el gol, luego marcó pero se lo anularon por fuera de juego y minutos después logró al fin su primer tanto de blanco.
Conciliador El francés aprovechó para revitalizar a los tres cambios