El Bergantiños y la lluvia ponen a prueba al Sevilla
Lopetegui no se fía y deja a muy pocos titulares en casa
El Sevilla visita esta tarde al Bergantiños en Riazor con la intención de cortar de raíz el conato de caída que han provocado las dos últimas derrotas consecutivas en Europa League y LaLiga. Lopetegui está convencido de que el nuevo formato va a provocar numerosas sorpresas y el Sevilla espera no ser una de ellas, porque lo contrario supondría que la mencionada caída se convirtiera en una crisis con todas las letras.
Es por ello que el técnico sevillista desplazó hasta Santiago, donde aterrizó el equipo antes de poner rumbo a La Coruña, a 20 futbolistas entre los que se encuentran muchos titulares habituales. Son los casos de Koundé, Banega, Jordán, Ocampos o Munir, mientras que en casa se quedaron los tocados Nolito y Navas, además de Diego Carlos, Fernando y el discutido De Jong.
El Bergantiños, por su parte, vive hoy una especie de noche de Reyes adelantada. Tras el varapalo que supuso la decisión de la Federación de no permitir que la eliminatoria se disputara en las instalaciones de As Eiroas en Carballo, y la posterior polémica por la negativa del Deportivo a ceder el estadio de Riazor, el estadio coruñés será finalmente el escenario del choque. Se han vendido más de 3.000 entradas y el Concello de Carballo ha puesto autobuses a disposición de los aficionados para facilitar los traslados de ida y vuelta a La Coruña.
Borja Facal, que colgó las botas y el brazalete de capitán del Bergantiños a la conclusión de la pasada temporada, asumió el cargo de entrenador hace un mes y tiene a toda su plantilla disponible. Nadie quiere perderse un choque histórico ante el que era, probablemente, el rival más atractivo de cuantos había en el sorteo.
Se espera mucha lluvia a la hora del comienzo del partido, pero en Nervión se tiene claro. “Queremos ganar la Copa y todas las rondas son finales”, dijo Lopetegui en la previa. El camino es largo y la primera parada es un Bergantiños que no tiene nada que perder y querrá hurgar en la herida sevillista.
Escenario
El Deportivo finalmente accedió a que el partido se jugara en Riazor