Para el técnico holandés, Wijnaldum es una pieza estratégica
Ahora no negociarían por menos de 30. El Barcelona intenta reducir el precio queriendo introducir a Samuel Umtiti en la operación, un jugador claramente devaluado y con un salario fuera del alcance del equipo francés.
La clave de la operación está en la salida de Suárez, que tiene un acuerdo cerrado con la Juventus, pero no consigue cerrar con el Barça la liquidación de su contrato.
El otro frente abierto de Koeman es la contratación de Wijnaldum, un jugador que el técnico considera estratégico para su proyecto. Le conoce bien y busca un futbolista que sepa interpretar el juego que tratará de imponer el nuevo técnico. Desde el club le reclaman una apuesta por otro estilo de futbolista en las mismas condiciones contractuales y de edad como Thiago, pero para Koeman no es negociable.
Pero mientras las negociaciones se alargan, Koeman necesita que sus demandas se hagan realidad porque la competición se acerca, el reloj está en la cuenta atrás y todo parece depender de las salidas. Las próximas semanas se avecinan intensas porque a la secretaría técnica de la entidad se le empieza a acumular el trabajo y Koeman quiere empezar a trabajar con los suyos. Y le faltan piezas.
Petición
LA SALIDA DE VIDAL, INMINENTE
Mientras la situación de Luis Suárez sigue enquistada, Arturo Vidal está a punto de cerrar su incorporación al Inter de Milán. Según la Gazzetta dello Sport, el chileno ha accedido a no insistir en cobrar el año que le queda de contrato para obtener así la carta de libertad y firmar por dos temporadas más una opcional con el club neroazzurro. Esta operación nada tendría que ver con el interés por Lautaro, que es una operación congelada.