El holandés reconoció el interés del Barça, pero Aulas se pone duro
Dentro de quince días el Barcelona de Ronald Koeman debutará en LaLiga recibiendo al Villarreal en el Camp Nou y a día de hoy el técnico culé sigue esperando las piezas que necesita para construir su proyecto. De momento, el entrenador blaugrana cuenta en un 90 por ciento con la plantilla que acabó el curso pasado más los cedidos que han regresado de sus experiencias en diversos equipos y los jugadores que se ficharon durante el curso pasado. Es decir, Koeman tiene jugadores pero le faltan las piezas que él desea. El nuevo entrenador del Barcelona aún no ha podido incorporar un jugador de su elección de cara al proyecto que tiene en mente. Los dos futbolistas que ha solicitado el holandés son dos compatriotas suyos: el centrocampista Georgino Wijnaldum (29 años, Liverpool) y el delantero Memphis Depay (26 años, Olympique de Lyon). El que parece estar más cerca de llegar es el segundo, aunque depende de cómo se vaya a solucionar la salida de Luis Suárez, que se complica por momentos.
Depay reconoció tras el partido del martes de Holanda ante Italia: “Sé que hay interés, pero no puedo decir mucho más, principalmente porque tampoco he hablado mucho con mi agente. Vamos a esperar a ver qué sucede... Mañana hablaré con el Olympique de Lyon”.
La postura del Olympique de Lyon y especialmente de su presidente Jean Michel Aulas no es de máxima colaboración por lo que se deduce de un tuit que colgó ayer. “Si Memphis pudiera irse en agosto, ¡tendría que quedarse con nosotros en la 20-21! Contrariamente a lo que he leído, no hubo negociación con el Barça, no creo que al OL le interese dejar marchar a su capitán tras este año truncado por la LFP”, aseguró.
El Olympique fichó a Depay por 16 millones de euros en 2017 del Manchester United que pagó a su vez 34 al PSV, donde coincidió con Koeman.
Depay