Victoria de mínimos
El Barça necesita una prórroga para empatar la serie ante el Zenit ● Mal Mirotic y Calathes ● Pau no jugó
Necesitaba el Barça una victoria para no asomarse al abismo y la consiguió, prórroga mediante, con un juego y unas sensaciones lejos de ser las ideales. No aparecieron ni Calathes ni Mirotic, Pangos siguió siendo decisivo y, al fin y al cabo, pudo vencer cualquiera: el Zenit tuvo un tiro para ganar el encuentro, pero Hanga acabó decantando la prórroga. Mucho deberá mejorar el Barça en una serie (1-1) en la que sí está brillando Davies.
La intensidad del equipo azulgrana fue otra en comparación al primer partido. Poco hace falta conocer a Jasikevicius para saber que no permitiría otro inicio como el del miércoles, como mínimo en la parcela defensiva. Con Oriola en pista (Pau no jugó), los visitantes no tuvieron tantas facilidades. El Zenit arrancó con una ventaja pequeña pero significativa (11-12). Ni el Barça salió en tromba ni estuvo cómodo, otra vez anulado por un
Xavi Pascual que preparó a los suyos a conciencia: 2/8 en tiros de campo para el Barça en 10 minutos. La defensa visitante, con dos tapones incluidos, ya presagiaba que iba a ser un partido durísimo para los culés.
Un triple de Baron llevó la ventaja hasta el 13-19 evidenciando que el Zenit anotaba con más facilidad. Los azulgrana sudaron cada canasta, fallaron desde fuera ante una defensa intensa y eficiente. Davies, al igual que el primer partido, fue clave no solo por sus puntos, sino por ser capaz de cambiar la dinámica del encuentro: devolvió el momentum al Barça (27-21). También acompañó Smits, acertado en el tiro, que llevó el partido hasta el 38-29 del descanso. No pudo el equipo catalán mantener la ventaja pese a que el tiro exterior siguió dándole disgustos a los rusos. Con unos porcentajes nefastos (mejoraron al final del cuarto), vivieron del error azulgrana y de los puntos de Thomas y Hollins. Pero empataron el partido (48-48) y metieron el miedo en el cuerpo a los catalanes.
El Barça sacó una ligera ventaja gracias otra vez a las canastas de Davies, pero no pudo sentenciar a un equipo que no tenía nada que perder. El Zenit siguió vivo, peleando y poniendo en un aprieto a los azulgrana hasta los minutos finales, a los que llegaron con plenas opciones (66-66). Fallaron Mirotic y Pangos. Y llegó la prórroga.
El Zenit llevó la iniciativa en el arranque del tiempo extra, agotando posesiones y desesperando al Barça. El acierto en el tiro libre mantuvo vivo a los de Jasikevicius hasta que Hanga liquidó el partido: lo empató con un triple y los sentenció con dos robos clave entre la sucesión de tiros libres de ambos equipos.