EL AMBIENTE DE SIEMPRE
El pasado viernes se acabaron las restricciones de aforo en Cantabria y la primera ocasión en la que El Sardinero podía volver a ser El Sardinero, lo fue. El último partido sin restricciones fue un Racing-Zaragoza, en Segunda, y lo presenciaron 11.263 espectadores. Ayer, un pequeño mensaje de optimismo, hubo mil más. El fútbol sigue adelante.