“Mis amigos del colegio me ven y flipan”
Jaime Pradilla
Bulle el Sheraton Grand Hotel de Berlín. Ataman por un lado, Itoudis por otro, Scariolo charlando en la terraza con algún conocido… Datome, Korkmaz, Dublevjic. Y aparece Jaime Pradilla, 21 años. Una de las sensaciones del Eurobasket comparte un cuarto de hora con AS.
—¿Cómo empezó a jugar al baloncesto?
—Pues empecé en los partidos de mis hermanos. Saliendo en los descansos en los momentos en los que me dejaban salir a tirar… Y luego empecé en mi club, que era el de mis hermanos, y hasta ahora.
—¿Siguen jugando sus hermanos?
—Ya no. Tienen 33 y 30 años, pero pude jugar contra ellos cuando era cadete. Mi hermano mediano, Adrián, estuvo en el Unicaja o en el Barça haciendo pruebas. Era muy bueno. El mayor, en la cantera del CAI.
—¿Qué significa para usted todo esto? Con 21 años compartiendo espacio con Doncic, Antetekounmpo…
—No me esperaba estar aquí e ir paseando y encontrarme a Gobert, Giannis… A estrella de la NBA. Los ves y dices: “¡Hostia, en dos días vamos a competir contra ellos!”. Estoy contento de cómo van las cosas y concentrado en Lituania.
—¿Qué le dicen sus colegas de toda la vida?
—A ver, tengo amigos que juegan al baloncesto, pero los de siempre, los del colegio en Zaragoza, no juegan y no entienden mucho, pero les gusta el deporte y flipan. Quedan juntos a ver los partidos y me ven y están contentos por lo que estoy consiguiendo.
—¿Lo está disfrutando, o aquí al final hay que competir?
—Es una responsabilidad, pero a mí me motiva mucho. Estoy disfrutando de ver a esta gente por aquí y voy a disfrutar como un niño pegándome ahí abajo.
—Esta tarde le toca con Valanciunas y Sabonis…
—Son estrellas NBA. Intentaremos que no entren en partido.
—Contaba el otro día Scariolo que desde que entró en la Selección para unas Ventanas le dijo algo así como que iba a estar mucho tiempo. ¿Qué cree que le gustó?
—Lucho todo el rato. Y esa ambición que tengo la transmito. Creo que Sergio no duda de mí por eso.
—Cuénteme la historia del dorsal 4, que es el histórico de Pau Gasol. Dijo: “Si él quiere, me lo quito”. Pero en realidad lo lleva por otros motivos.
—Mis hermanos lo llevaban y es por ellos. Es el número con el que empezaron, el que llevaron y me gusta.
—Esto es un hervidero de ojeadores NBA. ¿Se ve allí?
—Este es un buen escaparate y hay jugadores que ahora no tienen contrato o que lo mejoran. Pero yo estoy bien donde estoy, el Valencia me está ayudando a crecer. Si alguien ve que lo hago bien, habrá que hablarlo. Pero insisto. Valencia me está enseñando mucho.
—¿Quiénes son sus ídolos deportivos?
—He visto a muchos jugadores, pero con mis hermanos he disfrutado y con ellos me entró la pasión por jugar. Sin ellos, no me dedicaría al baloncesto. Luego, pues Felipe me ha gustado mucho. También Pau, Marc, Shengelia...
—¿Le han puesto algún vídeo para neutralizar a Sabonis?
—Sin dar pistas, sí que vamos a trampearles para que no lo tengan fácil.
—Si le dieran a elegir, ¿con qué jugador le gustaría enfrentarse en este Eurobasket?
—Me gustaría Doncic porque Luka es Luka; y también Jokic. Hacen cosas imposibles para los demás y ven el baloncesto a nivel extremo.
—Dicen que el top-3 de canciones en el vestuario está formado por Despechá, de Rosalía;
Quédate que la noche sin ti duele,y Feliz. ¿Eso es cosa suya?
—Eso es Joel Parra. Él te puede dar una buena playlist de canciones. Yo soy de música, pero según qué tipos. Para antes de partidos, Kase.O. Me gusta el
reggaeton. Cuando estoy tranquilo, pop de los 2000.
Llevo el número 4 por mis hermanos; es algo familiar y personal”