Álex Baena conquista el desierto de Beer Sheva
El mediapunta fuerza un penalti y marca un golazo de tijera
EI Villarreal sigue su camino en la Conference. Se sobrepuso en un partido duro en uno de esos encuentrsos que en Europa se suelen escapar aunque seas infinitamente superior. Álex Baena salió al rescate del Submarino. En la primera parte, esprintó para forzar un penalti cuando el Hapoel más apretaba. Y en la segunda, nada más empatar el Hapoel, se marcó un golazo de tijera para bajar el suflé israelita y conquistar el desierto del Neguev.
Se encontró el Villarreal en Beer Sheva lo que se esperaba: un rival compacto (con una línea de cuatro por delante de otra de cinco), enérgico y al 120%. Salió concentrado, al contrario que el día del debut ante el Lech Poznan. Y bastó una acción de mérito de Morlanes y una carrera prodigiosa de Baena para desnivelar la contienda. El almeriense tocó el balón medio segundo antes que Glazer. Penalti. Lo pitó. Y aquí no hay VAR que valga. Morales convirtió.
Perdón Jackson y Danjuma fallan ocasiones muy claras al final
Errores. El Hapoel no había dicho su última palabra y fruto de su empuje y una jugada plena de calidad, Hatuel fusiló a Jorgensen y la cosa se ponía negra para el Submarino. No le dio tiempo a apretar al Hapoel. Kiko abrió al hueco, Pino la puso perfecta y Baena redondeó su noche mágica.
Hasta ahí llegó el Hapoel que con más corazón que cabeza se volcó. Las contras fueron letales pero Jackson falló un gol a puerta vacía y Danjuma un mano a mano contra Glazer y un penalti, en el último minuto. El Villarreal, con su segunda unidad, sigue el plan marcado por Emery: ser primeros de grupo. Después, ya habrá momento para soñar.