Sergio Scariolo es el señor de las medallas
Solo Gomelski, con diez, supera al seleccionador
Aunque el mismo seleccionador dice que eso quedará bien cuando finalmente decida montar una sala de trofeos en casa, Sergio Scariolo empieza a amasar un palmarés que le convierte en el mejor seleccionador español de la historia. Con la victoria contra Alemania, que sitúa a España en la final de mañana, asegura su quinta medalla en un Eurobasket, con lo que supera a Dusan Ivkovic y Aleksanser Nikolic, que ganaron cuatro con la antigua Yugoslavia. Lejos del alcance de Alexander Gomelski, el Zorro plateado, que ganó diez, siete ellas de oro con la URSS. Sin embargo, Scariolo es el mejor seleccionador de la era moderna: el italiano añade a sus metales continentales el Mundial de China en 2019 y la plata olímpica de Londres y el bronce en Río.
Aterrizado en la FEB en 2009 después del paso exprés de Aíto por los Juegos de Pekín de 2008, contaba Scariolo el pasado jueves en AS que, a excepción de tres días en los que se sintió “en observación” por todas aquellas vacas sagradas que ya eran campeonas de Europa y subcampeonas olímpicas, ha sentido el respeto de quien, además, cumple con su trabajo. Scariolo ha manejado como nadie los equilibrios para añadir porcentajes de gestión o pizarra y ha creado equipos competitivos capaces de luchar siempre por medallas hasta el punto de que, siendo seleccionador, sólo se ha quedado sin metal dos veranos. En el Mundial de 2010, sin Pau Gasol y por un triple de locos de Milos Teodosic en los cuartos contra Serbia; y en los Juegos de 2021, donde la presencia de Pau, admirable por una parte, condicionó en parte el plan de un equipo que estaba construido alrededor de Ricky Rubio.
Campeón de los Eurobasket de 2009, 2011 y 2015 con un baloncesto que enamoró y que, por momentos, arrasó, bronce en Río 2016 al no poder de nuevo con EE UU, y en 2017 por la aparición de la revolución verde de Eslovenia, lo de este torneo alcanza la condición de obra cumbre para el italiano. España se colgará otra medalla y él empezará a quedarse sin espacio en su futura sala de trofeos.
Primero El italiano se ha colgado tres oros europeos: 2009, 2011 y 2015