Nueva vida para uno de los mejores de la historia
The Last of Us: Parte I sigue emocionando como el primer día
Que de The Last of Us es uno de los mejores juegos de la historia no admite debate, que necesitara una nuevo remake ya puede discutirse, porque tras su salida en PS3 en 2013 ya sufrió un importante lavado de cara un año después gracias a su paso a PS4.
Así que la cuestión es si hay tantas novedades para justificar ocho años después la compra del mismo videojuego. Si no se ha tenido el privilegio de jugarlo la respuesta es un sí rotundo. The Last of Us es una obra maestra, un título redondo que ofrece la mejor cara de la industria. Una jugabilidad medida, un apartado gráfico en el que se mima hasta el más mínimo detalle y una historia rotunda le convierten en uno de los más grandes juegos de todos los tiempos.
Dudas. Si por el contrario ya se ha disfrutado de la experiencia, sobre todo en su última versión (2014-PS4), las dudas aparecen.
Es verdad que se ha mejorado de manera notable la calidad de las imágenes, y no solo se trata de un upgrade, ya que Naughty Dog asegura que todo se ha creado desde cero. Es cierto que en general TLOU se va más oscuro, más cercano a la estética de su segunda parte. Se ha hecho un excelente trabajo en la recreación de los rostros, pero ya se venía de un punto donde se había rozado la excelencia.
Novedades jugables.
En este aspecto los chicos de Neil Druckman han pecado de conservadores, el juego es prácticamente el mismo, ni si quiera han remodelado aquellas partes que generaron más dudas en su lanzamiento.
Tampoco se han introducido nuevas mecánicas jugables, ni si quiera las que funcionaron en su segunda entrega, y simplemente se ha apostado por novedades cosméticas .