El Lyon sucumbe ante
Un gol del argentino sella la victoria del PSG, que encabeza ya la tabla en solitario después del pinchazo del Marsella
El PSG sigue saliendo victorioso en escenarios en los que no necesita, al menos en Francia, dar su mejor versión. En Lyon, uno de los campos más complicados de la Ligue 1, el conjunto parisino venció por la mínima a un rival directo por la parte alta de la clasificación. Messi, con un toque sutil en el primer tiempo, le dio la victoria a los de Galtier, que se colocan líderes en solitario con dos puntos de ventaja sobre el Marsella, que empató ante el Rennes al mediodía.
Sin tiempo para rotaciones, pues la cita cobraba muchísima importancia en la clasificación, Galtier decidió darle a Fabián la primera titularidad de la temporada. El español formó el doble pivote con Vitinha en un encuentro de quilates. Danilo, por Kimpembe, fue el otro cambio de un once que ya se lo saben de memoria la afición del PSG.
Difícilmente el PSG haya hecho 15 minutos como los que hizo en el primer tiempo en Lyon. Rozó la perfección. Messi, desatado, fue una pesadilla para el conjunto del Ródano. De hecho, el argentino pronto encontró la red, en una transición iniciada por Mbappé que acabó con un remate extraordinario del exjugador del Barcelona tras pase de Neymar.
El Lyon agonizaba como un animal a punto de morir y el PSG le daba vida, ya que Messi y Mbappé erraron dos ocasiones que podrían haber sentenciado el encuentro antes de tiempo. Los de Bosz, poco a poco, fueron reponiéndose de los golpes y tuvieron dos ocasiones clarísimas. Lacazette desaprovechó, de cabeza, un gran centro de Tolisso y Ekambi, que no fue capaz de potenciar el latifundio de la espalda de Achraf, remató cruzado una contra muy clara de los locales. Mendes, a bocajarro, evitó el 0-2 de Mbappé justo antes del descanso.
Buen inicio Durante los primeros 15 minutos, el PSG roza la perfección del juego
La figura. Tras la reanudación, el PSG puso el freno de mano y eso le dio alas al Lyon, que generó más peligro por ímpetu que por calidad individual en los metros finales. Messi, esta vez con un gesto extraordinario sentando incluso al portero, Antony Lopes, tuvo el 0-2, pero un inconmensurable Lukeba lo impidió en la línea de gol. El guardameta local fue el salvador del encuentro, evitando, con una parada imposible a Neymar, el segundo de los de Galtier. Entró Cherki para intentar darle dinamismo al Lyon, pero ya era demasiado tarde.