El conjunto español acaba con un segundo bronce
Sube al podio en la final de aro
Ayer acabaron en Sofía los Mundiales de gimnasia rítmica, que en uno de los países más destacados de este deporte ha supuesto el regreso del conjunto español a la vanguardia internacional: el bronce en la final general de conjuntos, que le ha servido para la clasificación olímpica directa, se une a un segundo bronce conquistado en la última jornada de finales por aparatos, en la de aros; en la del ejercicio mixto (pelota y cintas) las chicas de Alejandra Quereda lograron la quinta plaza.
En el conjunto de cinco aros estuvieron sobre el tapiz Ana Arnau, Inés Bergua, Mireia Martínez, Patricia Pérez y Salma Solaún (Valeria Márquez es la sexta). Se aspiraba a luchar por el oro aunque se partía de un sexto puesto en la clasificación pero en la final apareció el conjunto italiano, que en la jornada previa parecía mucho más accesible, pero que el domingo completó una actuación soberbia, muy destacado en el primer puesto (34,95), con Israel en segunda posición (34,050), por delante de las españolas (33,80) que no tuvieron opción ante el buen trabajo táctico y técnico de las transalpinas.
En la final de aparatos mixtos, España se quedó con el quinto puesto con una puntuación de 28,45, lejos de Bulgaria (33,30), que se colgó la medalla de oro con mucha holgura, ya que sacó dos puntos a Italia (31,45), su único rival, y más de 2,5 puntos sobre Azerbaiyán (30,750), bronce.
Estos resultados ponen en valor el trabajo de renovación que empezó Alejandra Quereda, que no llegó a Tokio 2020, pero ya es seguro que estará en París 2024.
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