Aunque se marche, siempre estará aquí

Como si se tratase del concierto de despedida de un grupo, Iniesta saltó al campo del Wanda con una idea en la cabeza: demostrar una vez más por qué ha sido uno de los cuatro o cinco mejores futbolistas de la última década. Dio un recital de juego, de control, de regates, de pases... todo ello coronado con un golazo. Se va, pasarán los años y los jugadores, pero Iniesta siempre estará con nosotros. David Burque Ciudad Real