Luis Enrique concedió la primera tarde libre
Después de tres victorias, el técnico afloja el paso
Después de tres victorias y catorce días de concentración sumando las citas de septiembre y la del presente mes, Luis Enrique concedió ayer su primera tarde libre a la Selección.
El asturiano está satisfecho con el rendimiento de todos los jugadores, y más allá de eso está contento con el encaje del grupo en su reglamento de concentración. Por eso decidió dar unas horas libres a los veintitrés convocados, exactamente desde el mediodía hasta las 21 horas de ayer, cuando todos estaban otra vez en Las Rozas para la cena en grupo.
Antes de Luis Enrique, el régimen de trabajo y libranzas estaba más difuso y era más laxo. En algún caso, como pasó en el Mundial de Rusia, ya dejó de ser incluso una potestad del técnico para pasar a convertirse en un capricho de los capitanes. Precisamente esa falta de autoridad fue lo que invitó a Rubiales a contratar a Luis Enrique por encima de otras propuestas. “Con él vamos a recuperar el orden”, dijo un alto federativo entonces. Rubiales no se ha manifestado públicamente al respecto, pero consta que está “encantado con Luis Enrique, y no sólo por las victorias, también por los modos que ha impuesto y por su autoridad sobre el grupo”. “Tenemos seleccionador”, se le ha escuchado exclamar al presidente de la Federación (RFEF) después de conocer algunas de las últimas decisiones del asturiano.
Los nuevos directivos de la RFEF salieron escandalizados de lo que vieron en la concentración de Krasnodar “donde no había disciplina, orden ni autoridad. Los jugadores hacían lo que les venía en gana y no había nadie capaz de meterles en cintura”, recordó ayer a este periódico uno de los colaboradores de Luis Rubiales, que no dejaba de hacerse cruces por cosas como la presencia de un peluquero en la concentración del Mundial. “Esas cosas se han acabado. Aquí se viene a jugar y a ganar, y todos han captado el mensaje”. El primero, el capitán. Ramos se pegó un esprint en la concentración de septiembre para no llegar tarde a una de las comidas de la Selección. “Ramos está dando ejemplo”, confirman en la RFEF.
Luis Enrique, mientras, afloja un poco el nudo y ayer dio su primera tarde libre. Él salió a correr y sudó un poco en el gimnasio. Se quedó en la residencia de Las Rozas, donde vio empatar a su Sporting en El Molinón. Su otro equipo, España, va mejor de lo que incluso él esperaba.
Resultado En la RFEF, Rubiales el primero, están felices con Luis Enrique