El Sevilla imagina ser líder y el Huesca, su metamorfosis

Francisco, a sorprender a Machín

Necesita el Huesca un electroshock. Sea de Francisco o de cualquier revulsivo inesperado, sus cinco puntos y su balance goleador (-13) es el peor récord de LaLiga. La radiografía de los números nunca es perfecta (de los 20 goles, 8 se los metió el Barça) pero sí sintomática. Ya sin Leo Franco y con Francisco como técnico, debe enmendarse, pero el calendario no le ha echado una mano. El Espanyol llegó a El Alcoraz como una moto y el Sevilla va casi igual. Es una apisonadora en un buen porcentaje de partidos. Seis goles al Levante y al Akhisar, tres al Madrid y al Eibar, cinco al Standard… Promes demostró el jueves que al Sevilla le sobran argumentos goleadores. Muriel, Ben Yedder, André Silva y el holandés están enchufados, Banega descansado y Navas y el Mudo jugando a su mejor nivel. Al Sevilla sólo se le ven las costuras cuando delanteros de primer nivel atacan su defensa. El sistema de Machín tiene sus riesgos y ahí sí se desnuda. Pero faltan primeras espadas en Huesca. Gallar brilló al inicio y Cucho no es tan determinante como en Segunda. Francisco intentará componer desde ya un equipo que se cargue de autoestima y se siente preparado. Estaría bien demostrar cosas en el Sánchez Pizjuán, estadio de tronío. El Sevilla, por lo demás, olfatea un liderato al que sólo sabrá si tiene acceso después de los partidos del Barça y el Alavés. Machín ha pedido actitud y fútbol al equipo.