‘Football Leaks’: Ramos vulneró el antidopaje
Asegura que incumplió la normativa en la final de Cardiff y Málaga
En 2017 El médico se equivocó al comunicar las sustancias inyectadas
En 2018 El capitán ignoró el protocolo y se duchó antes del control
Según informó ‘Mediapart’ y ‘Der Spiegel’, el capitán dio positivo en la final de la Champions de 2017 por dexametasona. La UEFA archivó el caso.
Football Leaks vuelve a sacudir el mundo del fútbol. El pasado 2 de noviembre, avanzaba que revelarían el cuestionable manejo de la prueba de dopaje positiva de una estrella mundial y ayer lo hicieron público. La figura era Sergio Ramos. Según publican Mediapart y Der Spiegel, el test antidopaje al que fue sometido el capitán del Madrid el 3 de junio de 2017, después de la final de Cardiff, encontró en la muestra del futbolista trazas de dexametasona.
La dexametasona es un preparado de cortisona con efectos antiinflamatorios y analgésicos incluido en la lista de sustancias prohibidas por la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), que sólo permite su suministro mediante un informe previo del responsable médico del deportista. En el formulario del control, el médico del Madrid no había mencionado que al futbolista se le hubiera administrado ese medicamento. Cuando la UEFA pidió explicaciones al jugador sobre el resultado del control, Sergio Ramos contestó traspasando la responsabilidad al médico del club, y adjuntó un informe firmado por el facultativo, que se atribuía la culpa del incidente. Según su versión, había infiltrado al jugador en el hombro izquierdo y en la rodilla izquierda, en los que venía arrastrando “dolencias crónicas”, con la sustancia que detectó el control. Sin embargo, en el formulario que acompañaba a la prueba, donde debía haberlo indicado, anotó 1,2 mililitros de otra sustancia, celestone cronodose, más conocida como betametasona. Igual que la dexametasona, se trata de un glucocorticoide que también tiene efectos antiinflamatorios y está prohibido por la AMA. Según el informe de UEFA, Ramos “En relación a la información publicada por Der Spiegel referente a nuestro capitán Sergio Ramos, el club manifiesta lo siguiente:
1. Sergio Ramos nunca ha incumplido la normativa de control antidoping.
2. UEFA solicitó información puntual y cerró el asunto referido inmediatamente, como es habitual en estos casos, tras la verificación de los propios expertos de la agencia mundial antidopaje, AMA, y de la propia UEFA. 3. Sobre el resto del contenido de la mencionada publicación, el club no se pronuncia ante la evidencia de lo insustancial de la misma”. estuvo acompañado en el control antidopaje por el “Dr. A” y fue el que firmó el formulario junto al jugador. Semanas después, tras descubrirse la dexametasona, el “Dr. A” mandó un informe asumiendo el error a la hora de informar del tratamiento. Según el médico, se equivocó al comunicar las sustancias inyectadas (Celestone Chronodose) en el hombro y la rodilla debido a la “euforia del momento tras ganar el título”. Argumentó que nunca tuvo la intención de “infringir ninguna regulación antidopaje”. La versión del galeno fue aparentemente bien recibida en la unidad antidopaje y la UEFA cerró el caso. Ayer, precisamente, la máxima autoridad del fútbol europeo se pronunció sobre el caso: “La UEFA ha informado tanto a la AMA como a la FIFA de todos los casos requeridos por el Código de la AMA y la UEFA ha proporcionado toda la información detallada, informes de expertos y evidencia durante el manejo de dichos casos”.
Málaga. No sería la única vez que Ramos habría incumplido las normas de antidopaje. El 15 de abril de este año, tras el partido contra el Málaga, fue llamado para el control antidopaje. Los documentos de Football Leaks revelan que el jefe de la Unidad de Control de Dopaje de la Agencia Antidopaje española mandó un informe de dos páginas al jefe médico del Madrid seis días después en el que informó de lo sucedido. Ramos le habría preguntado si se podía duchar antes de dar la muestra de orina, alegando que el equipo quería volar a Madrid lo antes posible. Pero se lo prohibieron. Según las normas de la agencia no es posible ducharse o ir al servicio antes de un test de orina. Sin embargo, el sevillano ignoró las indicaciones y se duchó. La Agencia Estatal Antidopaje archivó el caso.