Trituradora de directores deportivos y entrenadores
La inestabilidad vuelve a estar presente en Heliópolis con la destitución de otro entrenador y el enésimo proyecto deportivo fallido en manos de la actual directiva. El equipo verdiblanco quiere ahora garantizar la permanencia lo antes posible en este cierre de temporada.
■ La marcha de Rubi supone un nuevo revés a la entidad desde que Ángel Haro y José Miguel López Catalán tomaran los mandos del Betis hace cinco años. Bajo su mandato pasaron ya cuatro directores deportivos y ocho entrenadores: todo un cúmulo de proyectos que está muy lejos del crecimiento deportivo que generaron las expectativas. Miguel Torrecilla, Eduardo Macià y Lorenzo Serra Ferrer capitanearon las direcciones deportivas antes de que López Catalán tomara los mandos el pasado verano bajo una remodelada estructura en la que se incluyeron también nombres de proyectos pasados. El resultado tampoco ha sido el esperado. Sólo con Serra al frente el club encontró durante su primer año el camino de Europa y una cierta fiabilidad deportiva con Quique Setién en el banquillo. Pero los técnicos también se multiplicaron en estos cinco años: Pepe Mel, Juan Merino, Gustavo Poyet, Víctor Sánchez del Amo, Alexis Trujillo, Quique Setién, el recién destituido Rubi y de nuevo Alexis. Ninguno a excepción del cántabro pudo celebrar un fin de curso agarrado a los objetivos.
La revolución emprendida el pasado verano con el adiós de Serra Ferrer y de Quique Setién dejó paso a un nuevo fracaso deportivo. El futuro se presenta de nuevo lleno de interrogantes en Heliópolis tras el enésimo proyecto fallido de los actuales mandatarios. El club quiere atar lo antes posible la permanencia y volver a hacer cuentas este verano para emprender un nuevo intento de dar el ansiado salto deportivo que sigue sin llegar. La esperanza parece casi agotada.