LeBron será James
El alero llevará su apellido en la camiseta en lugar de un lema de justicia social
EI asesinato de George Floyd a manos de la policía de Mineápolis provocó un fuerte terremoto social en Estados Unidos y afectó de manera directa a los jugadores de la NBA. La lucha contra el racismo sistémico en el país, con pequeños brotes desde hace años, se convirtió en un tema capital para el reinicio de la temporada en la burbuja creada en el complejo de Walt Disney en Orlando (Florida). El sindicato de jugadores fue claro: o se les permitía continuar con la lucha o la vuelta a la competición sería muy complicada. Y la patronal aceptó, permitiendo, entre otras cosas, a los integrantes de la mejor liga del mundo cambiar sus apellidos por uno de los 29 lemas sobre justicia social acordados, que lucirán durante las primeras cuatro noches de la competición. A partir de la quinta, pueden regresar a su nombre habitual o combinar ambas opciones: el mensaje encima del número; el apellido, por debajo.
Ayer fue la fecha límite para la elección y la palabra más elegida fue Equality. Igualdad también se podrá leer en esloveno (Luka Doncic), italiano, francés criollo, letón, maorí, hebreo, bosnio y portugués. Black Lives Matter fue la segunda. Sin embargo, hay jugadores que decidieron no modificar sus camisetas, como LeBron James. La estrella de Los Angeles Lakers se mostró crítico con los mensajes, calificándolos de tibios. “Simplemente es que ninguno resonó seriamente con mi misión, con mi objetivo. Me hubiera encantado poder opinar poniendo algo en la parte posterior de la camiseta”, aseguró el alero. Su compañero Anthony Davis también descarta el cambio, aunque por motivos diferentes: “El nombre Davis es algo que trato de representar cada vez que estoy en pista. Es mi familia y es muy importante para mí”.
Jaylen Brown es de la misma línea argumental que LeBron. “Estoy muy decepcionado con la lista, es muy limitada”, aseguró el alero de Boston Celtics, una de las estrellas más reivindicativas tras el asesinato de Floyd: condujo 15 horas en coche para liderar una protesta pacífica en Atlanta. Entre las opciones descartadas por parte del sindicato están los nombres de las víctimas de violencia policial. Argumenta que elegir una u otra crearía un conflicto innecesario con los olvidados.