La hora de Immobile y la profecía de Mancini
El punta es criticado, pero el técnico confía en él
Ojalá tuviéramos un delantero centro” es una de las (pocas) críticas que más se escuchan en Italia sobre la Azzurra. Es cierto que, hasta ahora, el papel del punta es el único que no ha encontrado un protagonista con rendimiento alto y continuidad como ha pasado para portería, centrales, laterales, mediocampistas y extremos.
La realidad, sin embargo, es que la Nazionale sí tiene un delantero de enorme nivel, capaz de marcar 150 goles en 219 partidos con la Lazio, de igualar el récord de tantos en un campeonato de Serie A (36), y de hacerse con la Bota de Oro en 2020: Ciro Immobile. El napolitano, gran amigo de su conciudadano Insigne, con el que coincidió en el Pescara de Zeman junto con Verratti en 2012, había empezado bien esta Euro, con dos goles y una asistencia en dos partidos.
Ya ante Suiza, sin embargo, un par de errores delante de la portería rival le causaron las primeras críticas duras, que aumentaron tras su actuación contra Austria.
Mancini siguió apostando por él tanto ante Bélgica (su peor partido) como contra España, aunque sustituyéndolo en los minutos 74 y 62. A pesar de la falta de goles, su incansable trabajo sin balón ha sido alabado por técnico y compañeros.
Mañana, en la final, Immobile tiene la oportunidad para hacer historia y cumplir la enésima profecía de Mancini: “A menudo, en estos torneos, el que recibe críticas resulta ser decisivo...”.
Mancini “A menudo, en estos torneos, el que recibe críticas suele ser decisivo”