“El fútbol nos devuelve lo que nos quitó de mala manera”
Los recordados Marcial y Lico, fuerzas vivas del mejor Elche de la historia, se sientan con el incombustible Nino y repasan las idas y venidas del club ilicitano a tres años de su centenario
EHacienda,
l tanto de Pere Milla en el minuto 96 contra el Girona es para el Elche como el de Sergio Ramos para el Real Madrid en la final de Lisboa. Significó el ascenso a Primera y la vuelta a la vida después de cinco años inciertos, incluido el descenso a Segunda B en la 2016-17. Todo ello lo sufrieron Nino sobre el césped y Lico y Marcial desde su corazón franjiverde. Ahora juntos hacen balance.
—Se lo terminan de creer, el Elche es de nuevo equipo de Primera División.
—Marcial: Como para no creérnoslo después de todo lo que nos ha pasado. Es una ilusión enorme estar de nuevo en la máxima competición. Nos dolió mucho cuando nos bajaron sin ton ni son por cosas de despacho. No he vuelto al fútbol desde entonces, aunque ahora en Primera voy a volver. Me sentó muy mal que los dirigentes cometieran el error tan grande de no negociar con LaLiga. Los demás todos negociaron. Volver a Primera es como recuperar lo que nos quitaron de mala manera. Fue al único club que se descendió por deber cuatro duros. Otros han tenido deudas mayores y nunca pasó nada. Aquí no se supo hacer bien. Hay que hablarlo todo antes de bajar a un club. La culpa era de todos. Ahora se nos devuelve la vida.
—Nino: Yo vuelvo al Elche ya en Segunda. Ahora por fin veo cumplido el sueño de jugar en Primera con este club. Lo hubiera preferido muchísimo antes. Lo he peleado y trabajado, pero esto es como la vida. Las cosas llegan cuando tienen que llegar. Me quito una espina de encima con el ascenso y ahora quiero ayudar al equipo a conseguir el objetivo de la permanencia. Ahora ya tengo casi todos los deberes hechos. Con 40 años conseguirlo me permite mirar
Primera Elche Zaragoza
para otro lado con la satisfacción del deber cumplido. —Lico: Suscribo todo lo que ha dicho Marcial. Hemos sufrido mucho todos estos años. Estuvimos a punto de desaparecer. Fue dramático, pero nunca he dejado de venir a ver al equipo. En Segunda, en Segunda B. Nosotros siempre jugamos con el Elche en Primera y verlo en Segunda B fue muy duro. Salir de allí era muy difícil entonces. Lo pasamos muy mal. Ver al club en Primera nos rejuvenece. Sentimos la misma ilusión que sentíamos entonces, en los 60, cuando éramos un club de Primera en toda regla.
—Nino, usted qué sabe del Elche de Marcial y de Lico, de ese gran equipo que estuvo en Primera desde la 59-60 a las 70-71 y después desde el 73 al 78.
—Marcial: Pero sí él no había nacido qué va a saber de nosotros…
—Nino: Es verdad. Nací en el
Girona.
80, pero sé perfectamente quienes fueron. Llevo lo suficiente en esta ciudad para haber escuchado las gestas de aquel equipo. Ellos eran internacionales. Son historia viva de nuestra camiseta, pero no he podido disfrutar de ellos ni por televisión. He tenido de entrenadores a los dos así que he tenido la oportunidad de sacar lo mejor de ellos, absorber su experiencia y eso ya es importante para mí. —Marcial: De mí poco has podido absorber. Fui mal entrenador para ti. Te sacaba poco y a lo peor estabas o estás un poco dolido conmigo. Seguro que ahora jugarías mucho más. Entonces eras un chaval, tenía 18 o 19 años. Era la temporada 2000-01.
—Lico: Nino ha sido siempre muy respetuoso con todos los entrenadores. Yo llevo toda la vida en el club y conozco perfectamente su comportamiento. No ha tenido problemas con nadie. Por eso además de sus condiciones futbolísticas es tan querido por todos en la ciudad. —Marcial: Estoy de acuerdo, muy educado y respetuoso, hasta cuando yo no le ponía… Ja, ja, ja… De mí se cagaría en la madre que me parió por no ponerle… Pero somos amigos y sabe que son cosas del fútbol, etapas que uno se equivoca o no. Había otros futbolistas. Jugó menos, pero también jugaba.
—Nino: Me animaba mucho. Se ponía a jugar con nosotros con su zurdita y salía bien de los lances. Yo no era de tirar faltas, él las tiraba de maravilla y me animaba a que las lanzara en los entrenamientos. Con Lico tuve más contacto.
—Lico jugó con 38 años en el primer equipo. Nino con 40... —Lico: Hice el recorrido a la inversa. Acabé en el Albacete y volví seis años al filial. Me convencieron para que jugara con el Elche unos partidos a mitad de temporada. Iba a cumplir 39 años. Estábamos en Segunda. Si jugaba arriba ya no podía volver al Ilicitano y yo era feliz jugando todas las semanas. Jugué solo dos partidos y me retiré. Contra el Cádiz y el Castilla. Era la temporada 82-83. Desde la 65-66 que debuté aquí, no está nada mal.
—¿Cómo ven Lico y Marcial a Nino?
—Marcial: Le admiro muchísimo. Llegar a los 40 años es algo extraordinario en los tiempos actuales. Los de Lico, eran otros tiempos. Yo a los 33 estaba hecho una mierda y me tuve que retirar. Tenía los tobillos hechos polvo, las rodillas también. Un día fui al médico y me dijo que tenía todos los meniscos rotos, troceados y calcificados. ¿Dónde vas? Me dijo que me ponía una prótesis y ahí estoy. Ahora se entrena muy bien, los jugadores se cuidan mucho más y si tienes la suerte de no tener lesiones importantes, eso es clave, pues duras como Nino. Pero si estás como estaba yo, te tienes que ir. Nino está fuerte, está fenómeno.
—Nino: Tiene razón, he tenido suerte con las lesiones. La más grave la tuve con 33 años en Osasuna. En la pretemporada me rompí el cruzado. Me recuperé fenomenal. A los cuatro meses estaba prácticamente con el equipo.
—Me decía Del Bosque hace un par de días que el Nino que él recuerda que llegó a la Ciudad Deportiva con 15 años se parece muchísimo al Nino de ahora… Que es el mismo tipo de jugador.
—Nino: Estuve dos años en el Real Madrid. Cadete y juvenil. Puede que Vicente tenga razón y fuera como soy ahora. No me acuerdo con exactitud. Era un niño. No creo que haya cambiado mucho. Entonces me encantaba meter goles y ahora más. Vivía para ello y no he variado mucho. Recuerdo una anécdota que tuve con él. Era nuestro responsable y siempre íbamos con