Un triple fallado y una antideportiva del griego sellaron la derrota
Después de una semana agitada por el coronavirus, el Barça vio como se le escapaba el partido en la pista del Zenit de San Petersburgo tras encajar un parcial de 11-2 en los cuatro últimos minutos del choque. El pívot Alex Poythress, con 16 puntos y 11 rebotes, y el exazulgrana Kevin Pangos, con 15 tantos, llevaron a su equipo a un valioso triunfo ante un conjunto azulgrana sin continuidad en el juego. El Barça falló en el tiro exterior (7 de 23 triples) y se vio superado en el rebote (29 del Zenit frente a 21). El juego intermitente de Mirotic y de los dos bases, Calathes y Heurtel, también pesaron como una losa.
El encuentro estuvo a un paso de la suspensión después de que en el Zenit se detectasen tres positivos (dos jugadores y un masajista) y el horario del inicio se retrasó una hora para conocer los resultados de los test hechos a la plantilla rusa. Hay que recordar que por los positivos del entrenador del Barça, Sarunas Jasikevicius, su ayudante y un miembro del staff ya se aplazó del jueves a ayer. Además, sólo dos árbitros dirigieron el choque. El tercero, el montenegrino Igor Dragojevic, no pudo hacerlo por haber dado positivo en Covid-19 antes del partido.
El Barça salió muy sólido en defensa provocando perdidas al Zenit, pero el esfuerzo inicial (9-18, min. 8) pasó factura a los azulgrana, que poco a poco, vieron reducir su ventaja hasta que al inicio del último cuarto los locales se pusieron por delante. Pero lo peor estaba por llegar: ese parcial de 11-2 coronado por un triple fallado de Calathes y una antideportiva del griego sobre Pangos que liquidaron definitivamente las opciones del Barça.
Calathes