La hostelería se reinv
Las limitaciones a causa del coronavirus han hecho que bares, restaurantes y pubs exploren nuevas vías para atraer a los clientes, siempre con seguridad
La pandemia del coronavirus ha afectado de lleno a todos los sectores económicos y todos ellos han tenido que adecuarse a una nueva normalidad con restricciones que les privan de su forma habitual de proceder. Sin embargo, quizá uno de los sectores más castigados es de la hostelería. Las medidas en este ámbito, con limitaciones de horarios y aforos, castiga especialmente a la hostelería por el modo de vida que se estila en España, muy dado a salir de bares para socializar con amigos y familiares. El asunto se agrava en aquellas localidades donde se detectan brotes, con restricciones todavía más estrictas. Unas medidas que han tenido un impacto en los establecimientos, tras reducir el número de mesas disponibles. En algunos casos, donde el cierre se produce antes por las medidas, los locales instan a adaptarse a un horario más europeo.
Las bodas, en crisis.
Tomás, uno de los propietarios del Hotel San Roque, en Villanueva de Alcardete, nos confirma que, en su caso, han pasado de tener ocho mesas a únicamente cuatro en el bar. La alternativa, las terrazas, han salvado en parte el verano. "Este verano no ha estado mal, siempre con las limitaciones vigentes. Hemos tenido que quitar mesas y acoplarlo a la normativa". Una de las alternativas llegó con el envío de comida a domicilio: llegó en plena pandemia y seguirá tras una buena aceptación.
En este pequeño negocio familiar, además, realizan bodas en sus salones. Sin embargo, este año ha sido crítico. "Teníamos 31 bodas y se han cancelado todas, se han pospuesto. No sé el año que viene cómo estará la situación, esperamos que vaya a mejor", afirma Tomás. El verano, con la posibilidad de disfrutar de las terrazas, ha minimizado de alguna forma las pérdidas, pero ahora con la llegada del otoño la previsión puede ser peor, tal y como aseguran desde el Hotel San Roque. "Será complicado una vez que haga frío y no se puedan usar las terrazas como ahora. Esperemos que la gente decida venir. Notamos que la gente está con temor a salir y entrar en los bares, y sobre todo cuando sea en el interior". La instalación de estufas en las terrazas no sería una solución, pues "la gente para comer o cenar prefiere el interior".
Las medidas que han modificado los horarios de los establecimientos encaminan a los propietarios a adaptarse a un estilo más europeo
Control del ocio nocturno.
Desde la nueva normalidad, el ocio nocturno ha estado bajo la lupa. Ellos también han tenido que reinventarse para garantizar la seguridad de todos.