Puede jugar para darle descanso o en doble pivote con el brasileño
El Real Madrid ha firmado a uno de los jugadores más contrastados de Europa. David Alaba (cumplirá 29 años el próximo día 24) lleva una década en la elite, siendo indiscutible en el Bayern Múnich, dominador insaciable de la Bundesliga y siempre candidato a la Champions. La regularidad del austriaco ha sido su mayor virtud: un jugador de los que falla poco y que cumple en cualquier posición que necesite el entrenador. Y es que los blancos se llevan, a coste cero, un multiusos con el que podrá reforzar varias posiciones. La principal y, seguramente, donde más juegue es en el centro de la zaga. La salida de Sergio Ramos ha debilitado gravemente la posición y Varane también podría marcharse este verano. Por ello, la incorporación de Alaba era prioritaria. Además, el equipo tenía el déficit de no contar con un central zurdo, algo que gana con el austriaco. Como valor añadido, también ha rendido a la perfección cuando se le ha utilizado en línea de tres centrales, tanto en un lado como de líbero.
La otra posición en la que suele desempeñarse, y en la que está más cualificado, es la de lateral izquierdo. En este caso, el Madrid tiene el costado bien cubierto con Mendy y Miguel Gutiérrez. Incluso todavía cuenta con Marcelo, ya que la idea del club es que salga este mercado, pero el brasileño prefiere cumplir su contrato. Sin embargo, como ya ha
Ya sé que Alaba también ha jugado de central en el Bayern, pero esa es justo la posición en la que menos luce su calidad posicional y su técnica, como bien nos explica Álvaro Benito. Lo importante es su condición de multiusos. La estrella de la selección austriaca es un comodín que te resuelve tantos problemas que seguro que Ancelotti se estará frotando las manos. Ya lo disfrutó Carletto en Múnich. Ahora le tocará a Alaba no decepcionarle.
Casemiro