Sergio Rodríguez no jugará más con España
Es la tercera despedida del verano tras la de los Gasol
Después de estos días de descanso y reflexión, tras tantos años en la Selección nacional, ha llegado el momento de decir adiós. No ha sido fácil, pero estoy seguro de que es el momento apropiado”. Con estas palabras Sergio Rodríguez puso ayer punto final a su carrera con España. El base tinerfeño, ahora en el Armani Milán, confiesa que durante años ha sido “muy feliz” y se ha sentido “un privilegiado por hacer lo que más le gusta y contribuir a los éxitos de la Selección”. “Mis expectativas, cuando empecé, se han visto superadas en éxitos y experiencias”.
El Chacho debutó con la Selección en el verano de 2005 (en aquel Eurobasket, España acabó cuarta) y, un año después, se colgó el oro mundial en Saitama. Se marcha de la Selección tras 154 partidos, 885 puntos, 456 asistencias y siete medallas: dos oros
(Mundial de 2006 y Eurobasket 2015), dos platas (Eurobasket 2007 y Juegos Olímpicos 2012) y tres bronces (Europeos de 2013 y 2017 y los Juegos de Río en 2016).
“Para mí los veranos desde el año 2000 siempre han estado ligados a las concentraciones de las distintas categorías de la Selección. Esas convivencias han marcado mi carácter y mi visión del baloncesto como experiencia de vida. Ha sido un lujo pertenecer a esta familia y espero haber podido responder adecuadamente a los retos a los que nos hemos enfrentado, siempre juntos y sin fisuras”, se despedía Sergio Rodríguez en la carta publicada en redes sociales.
El del Chacho es el tercer adiós de la Selección después de que los hermanos Gasol anunciaran tras la cita olímpica que no jugarían más con España. “Ha sido un pilar fundamental de la historia de la última década y media de la Selección”, explicaba después Jorge Garbajosa, actual presidente de la Federación y compañero de Selección de Sergio Rodríguez los veranos de 2005, 2006 y 2007. “Hablar del Chacho para mí es especial porque hemos compartido campeonatos y concentraciones, numerosos éxitos y afortunadamente pocos sinsabores. Nuestra relación ha ido más allá de la de simples compañeros, es por encima de todo de amistad. Las puertas de la FEB están abiertas para él porque nunca va dejar de formar parte de nuestro equipo”.