Vallecas despide el año con un derbi de enrachados
Vuelven Trejo y De Tomás; Velázquez duda arriba
allecas abre el telón por última vez este 2017. Un año en el que el Rayo ha ganado diez veces, ha empatado siete y ha perdido tres ante su público. De su última derrota en casa ya hace más de tres meses (0-3 ante Osasuna, el 10 de septiembre) y los franjirrojos encadenan siete jornadas sin perder en su feudo --una más de las que enlazaron el pasado curso (seis), cuando Míchel tomó las riendas del equipo--.
Ese aliento de la afición se vio durante el entrenamiento en la previa del derbi, una fiesta de color (confeti, un tifo gigante en el lateral de la Avenida de la Albufera...) y cánticos en Vallecas. Una fiesta, por el 25 aniversario de Bukaneros, que culminará con el corteo al equipo (mercado de Nueva Numancia, 19:00), el recibimiento a los jugadores entonando el himno... Una fiesta a la que también está invitada la solidaridad: habrá recogida de juguetes en los accesos de las puertas 1 y 3 (junto a la tienda oficial) y en la entrada por Arroyo del Olivar. Los protagonistas serán dos equipos que, además de vecinos, son amigos. Por lo que se dan todos los ingredientes para que haya un gran ambiente.
Rayo y Alcorcón llegan pletóricos a la cita, en racha. Y no es para menos. Míchel recupera a De Tomás (fuera de las cuatro últimas convocatorias por una tendinitis rotuliana, un proceso febril y un esguince en el tobillo izquierdo) y a Trejo, que ha acortado plazos y ya está recuperado de su dolencia en el bíceps femoral. Ambos están disponibles, aunque acaban de salir de una lesión y podrían no ser titulares. En ese caso, Chori y Aguirre cogerían su testigo.
Velázquez, por su parte, ha dado con la tecla: ya ha encontrado su once tipo y su propio estilo de juego. Ingredientes que han hecho que el Alcorcón viva un momento dulce, que le hizo ganar a Osasuna en El Sadar, con remontada incluida. De ahí que los alfareros no se arruguen ante esta visita a Vallecas. El técnico amarillo sólo tiene una duda: si alinear a Pereira como delantero centro o volver a confiar en Álvaro Giménez.