Lasmar es el niño prodigio de la medicina brasileña
Rodrigo Campos Pace
Lasmar tiene 48 años y es una referencia de la medicina deportiva brasileña, una de las más respetadas del mundo. Jefe del departamento médico del Atlético
Mineiro desde 2001, fue el doctor de la selección brasileña en tres Mundiales, incluido el de Japón-Corea
2002, cuando Brasil ganó el pentacampeonato (sólo no estuvo en el Mundial de
Sudáfrica 2010 por problemas personales). Él tenía tan sólo 32 años. Antes de ser el niño prodigio de la ortopedia verde, Rodrigo Lasmar ya conocía bien el entorno del fútbol de élite de su país. Su padre, Neylor, fue el médico jefe de la selección brasileña en el Mundial de
México 1986 y del Atlético Mineiro entre 1975 y 2000. Era hombre de confianza del gran Telê Santana y trató a toda una generación formada por Zico, Sócrates y Careca. Rodrigo era un niño todavía, pero su padre le llevó junto con la comitiva de la
Canarinha a México, donde vio de cerca el tratamiento de Zico, que llegó lesionado a aquel Mundial. Profesor de ortopedia de la Universidad de Ciencias Médicas de Minas Gerais, su capacidad supera las relaciones personales: trabajó con Scolari,
Menezes, Dunga y Tite en la Canarinha.