Un set imperial
Los subcampeones del Mundo se llevaron un repaso que tardarán en olvidar. La nueva España de Luis Enrique deslumbró en Elche con una actuación pletórica. ¡6-0!
Elche talismán. Fiestón en el Martínez Valero. Elche es una ciudad talismán para España. Las cinco veces que el equipo nacional llegó por aquí se fue con pleno de triunfos ante Bélgica, Macedonia, Ucrania, Egipto e Italia. Ante los croatas se culminó ese idilio entre Elche y La Roja.
Ojo a los guarismos: 17 goles a favor, sólo uno en contra. Dan ganas de darle a los ilicitanos la condición de sede vitalicia. Magnífica afición, que se llevó ese alegrón que nos arrebataron en Rusia los errores cometidos antes y durante el Mundial. Esta España es un equipo radiante, imponente, feliz, vertical y ofensivo. Muy ofensivo. Y cuando eres descarado, no especulas, buscas el gol con ansia y tienes talento, pues sólo tienes que sentarte a disfrutar del espectáculo. Subidón.
Luis Enrique, ok. Al asturiano hay que darle un alto porcentaje de la brillante metamorfosis que nos tiene en Babia. La semana pasada, al inicio de la concentración, sorprendió a sus hombres llevándoles a un escape room, un juego interactivo que consiste en meterte en una zona cerrada y tener que buscarte la vida para encontrar la salida. Utilizaron tres variantes: Prison Break, Madrid Central Bank y Asesino del Zodiaco. Se utiliza en las empresas para fomentar el trabajo en equipo. Pues éxito total de la atrevida iniciativa. Triunfo de prestigio en Wembley ante Inglaterra y set imperial a la Croacia de Modric y Rakitic. Es curioso. Si en el Mundial hubiésemos eliminado a los rusos en aquella tarde de infame recuerdo, nuestro camino hacia la final de Moscú nos hubiera enfrentado a croatas e ingleses. Justo a los equipos que hemos pasado por encima en cuatro días que jamás olvidaremos. Es reconfortante haber recuperado el crédito. Y la ilusión.
Sextete blanco y 6-0. Por si alguien creía que el pasado azulgrana de Luis Enrique iba a condicionarle en sus apetencias a la hora de elaborar su propuesta, ya puede desterrar sus prejuicios y aceptar su error predictivo. Ya en la lista de convocados dio una pista al citar a seis del equipo de Lopetegui, incluido el joven Ceballos. Ante Croacia fue el no va más, dado que puso a los seis en el once titular (¡no veíamos algo igual desde un 3-0 a Irlanda del Norte en 2002!). Y le respondieron a lo grande. Asensio puso su sello en un golazo lejano y colaboró en otro al forzar el autogol del portero Kalinic. Carvajal dio la asistencia del primero. Asensio asistió a Rodrigo en el 4-0 y a Isco en el 6-0. El capitán Sergio Ramos firmó el 5-0 de cabeza... Pero no seré yo el que caiga en el error de identificar a esta radiante Selección sólo por el hecho de que haya mayoría blanca. Eso sería injusto con el protagonismo creciente de Saúl, que abrió la lata ante sus paisanos con un cabezazo imperial, lleno de garra. Y no olvido otro partidazo de Busquets, la aguja de este maravilloso compás. O la movilidad diabólica y la buena puntería de Rodrigo, que volvió loca a la zaga croata. Y buen debut del valencianista Gayà en el lateral zurdo, en el lugar de Marcos Alonso. Esta España tiene muchas Españas...
A por los ingleses. El 15 de octubre recibimos a los ingleses, semifinalistas del Mundial, en el Benito Villamarín. Me imagino otra fiesta española en la grada y en el campo. Hay que sellar un nuevo triunfo que apuntillaría el pase a esa Final a Cuatro de junio que asegura un nivelazo deluxe. Allí podrían estar Francia, Bélgica y Portugal. Uffff. Esta Liga de Naciones ha venido al mundo con una salud estupenda. Y la España de Lucho muestra la mejor analítica.