AS (Sevilla)

Pedri se convierte en la nueva bandera de España

Luis Enrique le nombra el heredero de Iniesta

- J. MAROTO /

Luis Enrique alabó a Pedri y le comparó con Iniesta. “Lo que le he visto hacer a Pedri con 18 años no se lo he visto hacer a nadie con su edad, ni siquiera a don Andrés Iniesta”. Un piropo de proporcion­es bíblicas para un jugador excelso, pero que ha terminado la Eurocopa sin realizar un sólo tiro a puerta y con sólo dos pases de gol, uno a Koke en la fase de grupos y otro a Oyarzabal, en la semifinal de Wembley. Iniesta, por su parte, aún es el segundo mejor asistente en la historia de la Selección, por delante de Silva y por detrás de Xavi, y, aunque nunca se destacó como goleador, fue quien marcó el gol de la victoria en el único Mundial que ha ganado España, en Sudáfrica 2010.

Pero Luis Enrique ve en Pedri el abanderado de la nueva generación. Para empezar, el centrocamp­ista culé ha sido junto a Laporte y Unai Simón el único que lo ha jugado todo. Dejó de disputar un solo minuto en el partido contra Suiza. Ha sido titular en los seis. Es un futbolista que juega y hace jugar, pero que para ser dañino de verdad necesita hacer lo que hace veinte metros más adelante. Con sólo 18 años, eso sí, ha demostrado madurez y una capacidad física portentosa. Se ha metido seis partidos, con tres prórrogas consecutiv­as entre pecho y espalda en 28 días y los ha terminado todos al galope. Un máquina. De las alabanzas de Luis Enrique a Pedri se extrae la conclusión de que el técnico quiere armar el futuro en torno al centrocamp­ista del Barcelona. Pero la comparació­n con Iniesta resultó exagerada, por lo menos para algunos de los que hemos vivido los doce años de Iniesta con la Selección. Pedri es bueno, muy bueno. Pero no es Iniesta. Por lo menos, no lo es aún. Puede mejorar su capacidad goleadora, aunque no será fácil. Pero le costará más convertirs­e en un maestro del último pase. Eso se tiene o no se tiene. Iniesta lo tuvo desde el primer día y a Pedri aún no se le ha visto.

Es cierto que su capacidad de mejora es enorme, puesto que tiene 18 años. Iniesta explotó más tarde, con 23. Pero cuando lo hizo fue un tsunami que lo cambió todo. Hay paralelism­os entre ambos, pero Pedri aún está lejos de su ídolo.“Iniesta no gana Balones de Oro, Iniesta los fabrica”, dijo un día sobre él Toni Grande, la sombra de Vicente Del Bosque. Pues eso.

Sus números Ha jugado todo, ha demostrado madurez y capacidad física

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Pedri, al finalizar el partido.

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