El Tenerife de Míchel ridiculiza al Real Valladolid
Los canarios marcaron en la primera parte y pudieron golear
EI Tenerife logró una victoria de mérito, de prestigio, en Zorrilla y pudo haberlo hecho goleando a un Real Valladolid que en la quinta jornada dista mucho de lo que debería ser un candidato al ascenso. Con las ideas poco claras, con un montón de dudas, los de Pacheta no son ni la sombra de lo que se podía esperar de una de las plantillas más importantes de Segunda. El Tenerife tenía claro su plan y sabía cómo llevarlo a cabo, el equipo pucelano no sabe cómo conseguir plasmar las ideas del técnico pucelano que sufrió una pitada importante y se fue abucheado del campo.
Y es que el conjunto de Ramis no dudó. Esperaba al conjunto blanquivioleta en su campo para salir rápido y coger al contragolpe a los pucelanos. Shashoua lo intentó una vez antes de lograr hacer diana, a la contra, deshaciéndose de Queirós, y batiendo a Roberto. Entonces los pucelanos tocaron a rebato. Tuvieron 15 minutos buenos, en los que encerraron al Tenerife en su campo. Alcaraz cabeceó al larguero, se pidieron dos penaltis y Olaza obligó a intervenir a Soriano. No acertó ninguno y, otra vez, a la contra, el Tenerife anotó el segundo. Míchel disparó desde la frontal, el balón pegó en el palo y le dio a Roberto en la espalda para meterse en la portería. En la segunda parte, los locales insistieron, Pacheta cambió el dibujo, pero el mayor control no se tradujo en ocasiones. Mientras tanto el Tenerife percutía a la contra, una y otra vez, pero entre Roberto y el palo evitaron una goleada de escándalo. Pudieron marcar Gallego, Elady, Emmanuel, Corredeira y Míchel, estos dos últimos en una triple ocasión que hizo explotar a la grada. Sufre el Pucela, sueña el Tenerife.