Bagnaia se desquita

El jefe de filas de Ducati se saca la espina de la caída de Le Mans y gana delante de Quartararo ● Aleix, tercero

No pudo Aleix Espargaró cumplir con su sentencia del sábado, la de que iba a ganar la carrera de Mugello, pero rascó otro podio, el cuarto consecutivo para él y su Aprilia, que le mantienen en la pelea por el título. Se quiere reenganchar a ella Francesco Bagnaia, con una victoria que le permite sacarse la espina de su caída en la cita anterior, la de Le Mans, y hacer ver a todos que el jefe de filas de Ducati es él y no otro, por mucho que Enea Bastianini sea el que más carreras de MotoGP ha ganado este año. La Bestia no pudo acabar la de Mugello porque, cuando estaba en plena remontada y amenazaba a Aleix, se fue al suelo.

El que hizo una gran carrera fue Fabio Quartararo, que en un fin de semana en el que había brillado menos en entrenamientos que otras veces, salía en el sexto puesto de la parrilla. Pues bien, el vigente campeón se las apañó para deshacerse de un escuadrón Ducati y acabar en una gran segunda plaza que le mantiene al frente de la general con ocho puntos de margen sobre el mayor de los Espargaró y 18 sobre Bastianini, que se dejó un botín muy importante con este error.

La actuación de Bagnaia fue de menos a más. La insólita primera fila compuesta por Di Giannantonio, Bezzecchi y Marini cumplió en la salida y se pusieron delante, llegando a liderar por momentos la carrera. Pecco, en cambio, partía quinto y perdió tres posiciones en la salida, llegándole a adelantar Márquez, que arrancaba duodécimo y con un salidón se puso séptimo. Eso sí, el del Repsol Honda luego se fue hacia atrás y acabó octavo en su última salida a pista previa a la cuarta operación en menos de dos años que le harán en su brazo derecho, de nuevo con el húmero afectado, esta vez con rotación.

Volviendo a Bagnaia, fue ganando posiciones paulatinamente y se puso en cabeza en la novena vuelta para ya no soltarla más. Cruzó la meta con 0.6 de ventaja sobre Quartararo, que se dejó ir en el último giro, porque tuvo al francés siempre controlado a un segundo de distancia.

En cuanto a Aleix, queda la duda de saber qué hubiera pasado si el de Aprilia hubiera sido capaz de quitarse antes de encima a Di Giannantonio, que le hizo tapón hasta la séptima vuelta. El de Aprilia, en todo caso, fue el que dejó las pasadas más bonitas, como la que le hizo a Marini en la curva 12 con un preciso y ajustado interior de derechas. Sigue en racha, por pilotaje y por una Aprilia que aquí ha estrenado motor y que va de maravilla. Eso sí, el apartado de la velocidad punta sigue siendo reino de Ducati, que aquí ha establecido un nuevo récord al ponerse Martín con la Desmosedici de 2022 a 363.3 km/h. Qué barbaridad.

General Fabio, líder del Mundial con cuatro puntos sobre Espargaró

Suzuki Mal papel de sus pilotos, tanto Mir como Rins se fueron al suelo

Más atrás. Tras los tres primeros, completaron las diez primeras plazas Zarco, Bezzecchi, Marini, Binder, Nakagami, Oliveira y Márquez. Más atrás terminaron Maverick 12º superado por sólo una milésima en meta por Di Giannantonio, Martín 13º, Álex Márquez 14º y Fernández 21º. No acabaron por caída Mir y Rins, que entendía que Nakagami le había encerrado y acabó enfadado por ello.