“No hay que esconderlo, esta generación es única”
El seleccionador Sub-17 atiende a AS antes de que La Rojita debute en el Europeo de la categoría ante Portugal.
Con un gran sentido de la responsabilidad pero cargado de ilusión, Hernán Pérez debuta al frente de la Sub-17 en un gran torneo. El seleccionador atiende a AS antes del primer partido ante Portugal consciente de que dirige a una generación dorada.
—¿Cómo han sido estos primeros meses al frente de la Sub-17?
—Ilusionantes, no hay otra palabra. Estoy en un sitio que representa a todos los jugadores españoles y tienen un talento extraordinario. Además, tiene un componente emocional de trabajar con chicos que van a pasar al profesionalismo en breve y verlos crecer en esta última etapa es un reto apasionante.
—Usted venía de entrenar al Lugo en Segunda, ¿por qué volvió al fútbol formativo?
—Porque nunca me planteo lo que va a pasar en el futuro. Pasé de dirigir al Juvenil A del Madrid al fútbol profesional y nunca pensé qué iba a hacer después. Surgió esta oportunidad, que para mí, aunque sea fútbol formativo tiene el nivel más alto de profesionalidad que hay. Cuando recibí la oferta de la RFEF me hizo una ilusión tremenda. Estar en la Selección, ya sea en inferiores o Absoluta, es lo máximo a lo que uno puede aspirar.
—¿Entrenar al Juvenil del Madrid se parece a dirigir a La Rojita?
—Ambas son prácticamente como dirigir en fútbol profesional. Tienes una responsabilidad altísima. Incluso más. Estamos tratando con menores en formación y tenemos una importancia vital en su educación deportiva y en la personal. Cualquier error que cometamos puede condicionar su futuro, pero intentamos darles las herramientas para que, con el talento que tienen, lleguen lo más lejos posible.
—¿Llegó a contar con Lamine y Cubarsí en algún momento?
—Cuando empezó la temporada, Lamine ya estaba en otra dinámica, pero Cubarsí fue al Mundial Sub-17 y luego vino a otra convocatoria contra Italia. Ha tenido una explosión que los que le conocíamos sabíamos que iba a tener. Cuando debutó con el Barça a ese nivel, ya sabíamos que hubiera sido injusto traerlo al Europeo. Está para mucho más y había que adelantarle el proceso. La RFEF cree en eso y tenemos a De la Fuente y Denia que continuamente demuestran que no les importa el DNI. —¿Cómo se sustituye a jugadores así?
—Es evidente que si estuvieran con la Sub-17, nos ayudarían mucho, pero bueno, su avance ha hecho que otros jugadores puedan dar un paso adelante y cada vez se lo van a poner más difícil a De la Fuente y Denia porque no van a parar de salir buenos jugadores.
—¿Esta generación 2007 es una generación dorada?
—Sí. No hay que esconderlo. A eso súmale a Cubarsí y Lamine. Los jugadores que hemos traído del Real Madrid también van dos generaciones por delante porque tienen mucho nivel,un talento extraordinario. Cuando la gente es buena hay que darles el premio de poder progresar y hay que exigirles. No se les puede disimular porque eso puede hacerlos conformistas. Abiertamente te digo que esta generación única tiene un talento extraordinario.
—¿Y eso no le añade presión a usted de cara al Europeo?
—Sí, pero en el buen sentido. Tengo una herramienta tan buena en las manos, tanto jugadores como staff, que me responsabiliza mucho a nivel individual porque me gustaría que todo saliera bien. Tratamos de disfrutarlo todos el máximo posible e intentamos calmar la ansiedad antes de que comience el torneo.
—En la lista hay seis jugadores que fueron al Mundial Sub-17, ¿los ve más preparados?
—La experiencia es una herramienta poderosa, sobre todo a estas edades. Estos jugadores son esponjas y lo absorben todo. Le agradezco a José Lana que apostara por ellos porque nos da un plus sobre otras selecciones.
—¿Qué meta se pone?
—Quiero ser muy respetuoso con todos los rivales, pero al grupo le he trasladado ambición. No pensamos solo en pasar el llamado Grupo de la Muerte. Vamos a por lo máximo. La dirección deportiva tiene dos objetivos fundamentales. El primero es formar jugadores para la Absoluta, que ese casi ya lo tenemos cumplido con Cubarsí y Lamine y confío en que más pronto que tarde tengamos más. Y luego, con una estrella en el pecho, el objetivo es el máximo. Obviamente no estamos pendientes del último partido, sino del primero, pero no puedo decirle a los chicos que nuestro objetivo es el máximo posible y luego que me escuchen decir que nos conformamos con pasar el grupo. Con todo el respeto para los rivales, que son muy complicados.
Lamine y Cubarsí “Tenemos una RFEF que continuamente demuestra que no mira el DNI”
Europeo “Con una estrella en el pecho, el objetivo no puede ser otro que el máximo”