AS (Valencia)

Muguruza cierra su año dulce entre las Maestras

Debuta hoy ante Pliskova en sus segundas WTA Finals de Singapur

- JUANMA LEIVA

Garbiñe Muguruza encara desde hoy ante Pliskova (15:00, Teledeport­e) las WTA Finals de Singapur. Cita a la que acude sin presión y pendiente de su tobillo, pero consciente de que la ocasión es magnífica para recuperar su mejor tenis.

Si estoy aquí es porque he sido una de las ocho mejores tenistas del año, y eso ya no va a cambiar”, comentó Garbiñe Muguruza en las horas previas a hacer hoy (15:00, Teledeport­e) su debut en su segunda participac­ión en el Torneo de Maestras, las WTA Finals de Singapur. Una cita nunca conquistad­a por una española (Arantxa, finalista en 1993) que se presenta abierta e impredecib­le, a pesar de que la hispano-venezolana, semifinali­sta en 2015, quiera eludir cualquier tipo de presión. De momento, su rival de hoy, la checa Pliskova, aparece con la engañosa etiqueta de ‘debutante’ en el torneo después de un año magnífico: títulos en Cincinnati y Nottingham, más final en US Open. Ante Muguruza domina el cara a cara (3-1) y está un puesto por delante en el ránking: quinta.

Por tanto, un encuentro en el que las opciones de Garbiñe pasarán por estar al 100%, y mucho dependerá del estado de su tobillo, ese que se torció y le obligó a retirarse en Linz. “Está entrenando sin problemas y el tobillo está bien”, tranquiliz­a su técnico, el francés Sam Sumyk, que vaticina a su pupila un choque “muy duro”: “Pliskova te da muy pocas opciones. Estás en constante presión ante ella por lo que tenemos que tener paciencia y esperar esas oportunida­des”.

Porque, si bien la cita sirve para poner la guinda al mejor año de Muguruza, el reto estará en ver si es capaz de reencontra­rse en Singapur con su mejor tenis, ese que desde que se coronara en Roland Garros ha sido cada vez menos frecuente. Sólo una vez pasó de cuartos desde que levantara el título en París. Fue en Cincinnati, donde cayó en semifinale­s ante, precisamen­te, la tenista que tendrá hoy enfrente, Pliskova.

Kerber. De la dureza del torneo bien puede dar fe Angelique Kerber, número uno, y que ayer hizo su debut en Singapur llevándose un durísimo encuentro ante la eslovaca Cibulkova. En dos horas y 17 minutos de partido, la alemana se encontró a una rival que no dio un punto por perdido. Más plácida fue la primera toma de contacto de la rumana Simona Halep, ante otra debutante como Keys. Siguiendo las directrice­s de su técnico (“haz que se arriesgue”, le aconsejaba el australian­o Darren Cahill) consiguió que su rival se marchara hasta los 41 errores no forzados.

Su técnico “Entrenó sin problemas y el tobillo está bien”, tranquiliz­a Sam Sumyk

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