Higuaín mira a Cardiff
Con sus dos goles pone a la Juve muy cerca de la final Mbappé se topó con el muro bianconero
Trece años después de su última semifinal de Champions ante el Chelsea, el Mónaco regresó a la penúltima ronda, pero esta vez se topó con una magnífica Juventus, que se impuso gracias al doblete de Higuaín y deja prácticamente liquidada la eliminatoria. Sin Mendy, lesionado poco antes de empezar, el Mónaco empezó con timidez, fallando muchos balones sencillos y estando poco concentrado atrás. Más acostumbrado a jugar duelos de esta máxima exigencia, la Juventus dominaba y Alves, después de una pared con Dybala, tuvo la primer oportunidad con un chut raso que Subasic paró sin dificultad.
Poco a poco, los jóvenes monegascos cogieron confianza y volvieron a encontrar su famoso juego de toque y la velocidad que les permitió eliminar al City y al Dortmund. Y como tantas veces en los últimos encuentros, una figura sobresalió en el equipo del Principado: Mbappé. La promesa francesa mandó, de cabeza, un primer aviso que Buffon bloqueó sin apuros, antes de adelantarse a Bonucci en carrera y obligar al portero a lucirse con una gran intervención al primer palo. Tres minutos mas tarde fue su compañero de ataque, el intermitente Falcao, quien se elevó sobre Chiellini para rematar de cabeza, pero Buffon salvó de nuevo a los suyos y despejó a córner.
Y cuando más cerca parecía el gol local, la Juve se adelantó en el marcador. En una estupenda acción colectiva que empezó en los pies de Buffon y continuó en una maniobra genial de Dybala, Higuaín lanzó a Alves por la derecha y el lateral le devolvió la pelota de tacón para el remate del exmadridista al fondo de la portería. Con este tanto, el argentino hizo callar las criticas que le reprochaban su falta de acierto en las citas importantes, con sólo dos goles en 24 partidos de eliminatoria en Champions.
El 0-1 fue un jarro de agua fría para los de Jardim, que volvieron a dudar de su fútbol, estrellándose contra la muralla italiana y sus dos goles encajados en todo el torneo. En el inicio de la segunda parte, sin embargo, una brecha apareció en la defensa turinesa cuando un balón mal despejado llego a los pies de Bernardo Silva. El portugués lanzó rápidamente a Falcao, que lo intentó con un chut demasiado flojo para inquietar a Buffon. Siete minutos después, en un córner, el Mónaco pidió un penalti de Chiellini a Bakayoko que Mateu Lahoz no pitó. Y como en la primera parte, cuando el Mónaco parecía más peligroso, un contragolpe de la Juve cambió el rumbo del partido.
Sentencia. Tras un balón perdido por Bakayoko, Dybala buscó a Alves y el brasileño centró para Higuaín. Olvidado en el segundo palo por Glik, el argentino remató con la zurda y firmó un doblete que abre de par en par la puerta de la final a los de Allegri. Con el ánimo muy tocado y muy cansado físicamente, el Mónaco no encontraba soluciones para intimidar a un equipo que no encaja gol desde la fase de grupos. En la recta final, Jardim hizo entrar a Germain y Moutinho y casi tiene premio en el minuto 92. El portugués lanzó una falta y el delantero remató de cabeza, pero Buffon despejó a córner esa última posibilidad. Con esta victoria fuera de casa, la Juve tiene un pie y medio en Cardiff. El Mónaco deberá mostrar mucho más dentro de una semana para aspirar al milagro...