El tesorero Larrea toma las riendas de la FEF
Pretenden cambiar los estatutos para eximirse de responsabilidad
Juan Luis Larrea, que ostenta el cargo de Tesorero, es el nuevo hombre fuerte de la FEF. Así se decidió ayer por la tarde en la reunión de la oficiosa Junta Directiva (la anterior). La nueva Junta no pudo constituirse legalmente ya que los estatutos de la FEF establecen que sólo el presidente puede nombrar los cargos, así que con Villar en la cárcel y suspendido de sus funciones por el CSD, ninguno de los presentes tenía la potestad de hacer efectivos los nombramientos que antes Villar había comunicado por carta a sus miembros federativos, carta en la que Marcelino Maté figuraba que sería el nuevo vicepresidente primero.
Los estatutos fijan que en caso de ausencia del presidente sus funciones serán asumidas, por orden, por los vicepresidentes, el Tesorero o el miembro directivo de mayor antigüedad, pero como el vicepresidente primero (Juan Padrón) está en la cárcel y Joan Gaspart se negó, el turno corrió hasta Larrea. Larrea sube un escalón en el organigrama de la FEF pero no es el presidente. Sólo asumirá sus funciones. Larrea, persona en la que siempre se apoyó Padrón.
Los directivos se pusieron de acuerdo para fortalecer al villarismo ante las adversidades. En la Junta no hubo críticas a Villar. Es más, decidieron que en la Asamblea General fijada para hoy, uno de los puntos del día sea la votación y posterior aprobación de la reforma estatutaria en la que se exima de responsabilidades judiciales a los directivos. En la Asamblea está previsto otorgar más poder a Esther Gascón, secretaria general, y a las territoriales, a éstas, principalmente, en lo referente a las transacciones económicas. La Junta decidió retirar del orden del día las cuentas 2016 y los “asuntos jurídicos”.
Los representantes de Segunda B y Tercera se negarán a votar propuesta alguna. Acudirán para exigir la aprobación de su calendario y que se les pague la parte correspondiente (1%) de los derechos audiovisuales. Tienen previsto, además, denunciar la celebración
A prisión Directivos quisieron ir a por un documento con el cese de Villar
de dicha Asamblea. Ayer por la mañana se escenificó por primera vez la ruptura en el seno de la FEF. Un bando disidente o de arrepentidos, como quiera llamarse, quiso iniciar el protocolo para la convocatoria de nuevas elecciones, y para ello tenían preparada una delegación de tres miembros de la Junta Directiva dispuesta a ir a la prisión de Soto del Real con el objetivo de regresar de la cárcel con un documento firmado por Villar en el que ratificase su cese como presidente.