Sheyla Gutiérrez, la ‘Hippie Lion’ es la baza para el podio
Ganó Le Samyn y en el Giro
Con seis años, me subí a una Peugeot heredada de mis hermanos y desde entonces no me he bajado de la bici”, cuenta Sheyla Gutiérrez (Logroño, 23 años). Una ciclista a la que en sus tres temporadas en el Lointek bautizaron como La Leona (“soy fiera, muy brava, no me da miedo nada”, lo justifica ella), y a la que en el Cylance estadounidense, donde cumple su segunda campaña, su compañera Alison Tetrick ha añadido una coletilla al apodo: Hippie Lion. “Voy a mi aire y me dan igual las pintas”, bromea. Lo que más le importa son las carreras. Y tras ponerse el maillot de campeona de España tiene otro sueño: una medalla en el Mundial de Bergen (15:00, 152 km). Su alias en Twitter es @Sheyarcoiris, significativo. Con el arcoíris se visten los campeones mundiales.
Pensar en medalla es difícil, pero no una utopía. En Doha 2016 fue octava. “Este año me viene mejor el circuito y por fin llevamos una selección completa (no ocurría desde 2009). Está siendo una temporada muy exigente, y llego algo justa”, relata. Le escudarán Alicia González, Mavi García, Eider Merino, Lourdes Oyarbide y Alba Teruel.
Sheyla, sobrina de los directores de la Escuela Municipal de Logroño, reinó en marzo en el adoquín de la clásica Le Samyn. “Era la segunda carrera y sirvió de impulso. Vi que podía luchar con las mejores”. Después, una etapa en el Giro de Italia en julio, algo que sólo habían logrado Fátima Blázquez (2002) y Joane Somarriba (1999 y 2000). En la Challenge de la Vuelta fue quinta.
La riojana, estudiante de Psicología, se mira en Alejandro Valverde, “pero sin mezclar la velocidad con el tocino”, se ríe, y se ha fijado la meta “de ganar el Tour de Flandes, el terreno de las leonas”. Más inmediato es el Mundial. En Bergen, la Hippie Lion anda suelta.