Sandra y Damián, contra la hegemonía japonesa
Esta tarde luchan por el oro en la modalidad de katas
Ayer el equipo femenino de kumite se quedó a las puertas de la final, y peleará por el bronce (el masculino cayó a la primera) porque se topó en las semifinales con Japón y, claro, contra ese rival que domina el karate mundial existe una prevención de los jueces a la hora de levantar la bandera: a Cristina Vizcaíno ni siquiera le permitieron la revisión de vídeo de un golpe, que era el empate a dos. Se lo dijo el seleccionador Arenas a sus chicas en el túnel de vestuarios, todas abrazadas a Laura Palacio, que había competido sin éxito para clasificar a España: “Lo habéis hecho bien, pero ya sabíais que contra Japón los jueces no nos marcan puntos. Es lo que hay. Pero habéis competido bien”. Las otras dos eran Cristina Ferrer y María Torres, que debutó en el grupo.
Es un aviso para lo que se van a encontrar esta tarde Sandra Sánchez y Damián Quintero en sus finales de katas (18:00) contra los vigentes campeones del mundo, Kiyou Shimzu y Ryo Kiyuna, respectivamente.
Sandra, bronce en el anterior Mundial, con la plata asegurada ya es la sucesora de Yaiza Martín, bronce individual en dos Mundiales. La talaverana es la primera española que accede a una final de katas. Nunca ha ganado a su rival, pero en los últimos encuentros todo ha sido muy parejo. “Ojalá que al ser la final en Madrid se pueda derribar el halo
Bronces Babacar y Raúl Cuerva también compiten para ganar una medalla
con que se visten a los japoneses”. Parece que no. Damián, subcampeón mundial, sí ha ganado a su rival de hoy, “incluso esta mista temporada en el Torneo de Dubai”. Sobre el papel, Quintero tiene más boletos para llevarse el triunfo.
Además, a las 10:15, es el turno de Babacar Seck en su pelea por el bronce en el peso de más de 84 kilos. Y por la tarde, para calentar al público español antes de los oros de kumite, Raúl Cuerva tendrá la ocasión de colgarse el bronce en menos de 67 kilos. Son los cuatro españoles de la penúltima jornada.