El teletrabajo promociona el extrarradio
La llegada, por el virus, de esta modalidad laboral permite a los habitantes de Madrid y de Barcelona buscar ciudades más baratas y menos pobladas
El teletrabajo se impuso sin avisar por el coronavirus en gran parte de la población y tiene en su mano dar una segunda oportunidad a las ciudades del interior de España por la necesidad de los habitantes de grandes urbes densamente pobladas, como Madrid y Barcelona (las más afectadas por el COVID-19) de una vida más tranquila, más barata y adaptada a la medida humana. “Es uno de sus beneficios principales porque trabajar en una gran ciudad y vivir fuera implica más de dos horas entre ir y volver, que nadie paga”, comenta Sonia Herrera, de la Asociación Española para el Impulso del Teletrabajo.
No sólo es el tiempo perdido, los precios cada vez más altos en el mercado inmobiliario de estos enormes núcleos de población, la alta contaminación, el ruido, el estrés... provocan que capitales de provincias como Toledo, Ciudad Real y Valladolid, en el caso de Madrid; y Lleida y Zaragoza, en el barcelonés, sean destinos muy apetecibles para empezar una nueva vida.
MADRID
Ciudad Real. Con Guadalajara ya integrada en Madrid (es el final del Corredor del Henares) y Toledo, a un paso por el AVE, Ciudad Real es la siguiente pieza de dominó. Tiene 75.000 habitantes (3,2 millones
Madrid) y los servicios de una capital de provincia. Conexión de alta velocidad con la capital (menos de 200 kilómetros las separan) y los precios del alquiler son tres veces menores.
Valladolid.
La capital de facto, pero no oficial, de Castilla y León tiene AVE y 300.000 habitantes: permite una mayor vida social y ocio más variado. Los precios de la vivienda son la mitad que en Madrid (a 190 kilómetros de distancia).
Talavera de la Reina. Semejante a Ciudad Real en población, indicadores de desarrollo y precios en el alquiler de la vivienda. Su principal problema es la ausencia de tren. Si no se tiene coche será difícil completar con éxito los 124 kilómetros que la separan de Madrid.
BARCELONA
Lleida. Los habitantes de Barcelona (el 45% de la población de Cataluña) ya se han expandido hacia Tarragona al sur y hacia Girona al norte. El próximo objetivo: Lleida, a 160 kilómetros. Cuenta con 135.000 habitantes (1,7 millones Barcelona) y los precios para el alquiler son 2,5 veces inferiores a los de la capital catalana. Su red de enseñanza, con universidad incluida, puntúan bien en los índices de la agenda 2030.
Ciudad Real, Valladolid y Talavera de la Reina son los lugares más atractivos en el futuro para los madrileños
Lleida y Zaragoza permitirían descongestionar a la capital catalana, donde habita el 45% de la población autonómica
Zaragoza. Su principal punto a favor es que al ser una gran ciudad ofrece más ocio y servicios que las pequeñas. Su hándicap es el mismo: sus 655.000 habitantes pueden no dar la tranquilidad deseada.