Es momento de estar juntos, ser honestos y fieles. Hay que seguir peleando”
—¿Qué opina de todo lo que está sucediendo en el Espanyol?
—Es momento de estar juntos, ser honestos y fieles. Hay que seguir peleando y, cuando acabe la Liga, ya se analizará y se pedirán responsabilidades si las hay.
—¿Por qué el año está siendo tan terrorífico?
—Hace justo un año empezábamos la pretemporada. Esto se ha hecho largo. Nos llenamos de Europa al comienzo y dejamos de lado la Liga. Pero los resultados te pesan. Te acostumbras a vivir abajo. Ha habido tres entrenadores, con tres mentalidades muy distintas. Hicimos fichajes nuevos a mitad de temporada. Siempre confiamos en que habría tres equipos peores, pero no está siendo el caso.
—Europa como sueño y después pesadilla...
—Era la ilusión. Las primeras derrotas en casa nos marcaron. Podía suceder, podía ser lógico, pero no fuimos capaces de darle la vuelta. Puede pasar aún de todo. No hay que hacer leña del árbol caído.
—¿Qué significaría un descenso en el Espanyol?
—Este club es historia de la Liga. Somos el quinto club de Primera. Jugamos con esa carga y ese peso. No somos un equipo de provincias. Tenemos un arraigo a las competiciones y peleamos hasta por el reconocimiento en nuestra ciudad. No nos pueden comparar con otros que descienden. Tenemos nuestra gente, que será la misma. Seguro que si el equipo baja, la Segunda puede ser una rampa de lanzamiento. No podemos ser soberbios. Somos el Espanyol pero nos equivocamos como todos. El Espanyol ha superado muchos momentos difíciles. Por honestidad hay que hacerlo lo mejor posible hasta el final. Lo veremos contra el Madrid. —¿Le entusiasma este Madrid que lucha por la Liga?
—Es un equipo en transformación. Para mí Zidane tiene buena mano. El Madrid funciona como un equipo y va mejorando. Debería pensar que si gana la Liga será fantástico, pero si no la gana no pasa nada, está haciendo equipo y va para arriba. El Madrid asciende y el Barça aguanta haciendo valer la responsabilidad de sus jugadores, pero necesita otras cosas. Tendrá que cambiar de plantilla. Si no metes jóvenes o haces fichajes especiales te convertirás en un equipo veterano con sus carencias. El Madrid está ganando en eso, el Barça va al revés.
—¿En su época también había polémicas arbitrales con el Madrid?
—Históricamente siempre ha pasado, pero al Barça también. A los grandes se les mira con lupa. A veces se mira la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio. Hay circunstancias como la de Messi, que comete un error, y luego le pitan un penalti discutido, y con el Madrid pasa igual. Al final los del Madrid van a favor de lo suyo y los del Barcelona también. Al Espanyol nos han perjudicado. Siempre habrá injusticias. —¿Ve al equipo blanco remontando al City en Champions? —Le veo. Gana los partidos por entidad y por el entrenador. No gana barriendo, pero pelea.