Rossi y Maverick: el duelo está servido
El Movistar Yamaha se presentó ayer en Madrid con la nueva M1 para esta temporada. Valentino y Viñales, una pareja que promete espectáculo, se marcan como reto recuperar el título de pilotos
Se apagaban las luces de la sala instantes antes de que comenzara la presentación y aparecían varios efectivos del cuerpo de bomberos. Pero no, en ningún momento hubo riesgo de incendio, tampoco chispas. Rossi y Maverick destaparon la nueva Yamaha M1 para esta temporada en la sede de Telefónica en Madrid. Con el único reto, que no es poco, de devolver el título de pilotos a la firma de los tres diapasones cruzados.
Fue un primer acto en el que Valentino ejerció de anfitrión con Viñales, casi como un hermano mayor. En su posado inicial ante las cámaras corrigió rápidamente la postura y pasó un brazo por el hombro de su nuevo compañero, de 22 años recién cumplidos. Gestos que no se vieron en ninguna première junto a Lorenzo. El balear era el gran ausente nueve años después de su llegada a Yamaha, aunque la firma recordó con un vídeo su título de 2015.
“En este equipo estoy acostumbrado a tener compañeros de equipo muy fuertes, como Jorge. Maverick me impresionó mucho desde el primer día, hubiera preferido que le llevara algo más de tiempo ser tan rápido (afirmó sonriendo), pero creo que podemos hacer una buena pareja y evolucionar la moto”, comentó Valentino.
Porque la moto necesita trabajo. Aunque los pilotos admiten que entre el test de Cheste y sus pruebas privadas en Sepang ha habido un progreso notable, la YZR M1 2017 todavía tiene mucho margen de mejora. Durante el curso pasado, Honda aprovechó sus evoluciones a mitad de temporada para abrir una brecha entre marcas y mantener a Yamaha diez carreras sin ganar. El prototipo de este año, de 1000cc, tiene un motor de cuatro cilindros en línea que genera 240 caballos de potencia y supera los 350 kilómetros por hora de velocidad máxima. La potencia gusta a Valentino y Maverick, pero han pedido mejoras en la dirección y probarán piezas nuevas a partir del lunes 30 en el circuito de Malasia, sede de tres jornadas consecutivas de test oficiales.
Jarvis, director de competición de Yamaha; Meregalli, director del equipo de MotoGP, y Tsuji, director general de Yamaha Racing, participaron en la puesta de largo de la firma. También Luis Miguel Gilpérez, presidente de Telefónica España, que dejó una tarea clara para Viñales: “Ganar, ganar y volver a ganar”.
Empiezan ahora semanas de trabajo contrarreloj para enfocar la configuración de las motos hacia el GP de Qatar del 26 de marzo. Será la primera ocasión para ver a Rossi y Maverick competir como compañeros, quizás entonces ya salten chispas en el box de Yamaha.
Estreno Rossi, pendiente de Maverick en su primer posado
Evolución Los pilotos han pedido una mejor dirección para Sepang