“Sentí la calma que nunca había sentido antes en un major” Sergio García
¿Qué fue distinto esta vez a las otras oportunidades que tuvo de ganar un major? —No sé cómo lo hice. Pensaba que lo tenía en el hoyo 18, con ese putt que debía haber caído a la izquierda y no lo hizo. Pero sentía la calma que nunca había sentido en un grande. Después de un par de bogeys en el 10 y el 11, no me encontré mal, me vi positivo y creí en mis posibilidades. Sabía que había hoyos en los que podría atacar. Pegué golpes muy buenos y saqué la raza. Creo que lo merecía. —¿Qué significa para usted ganar en el que hubiera sido el día del 60 cumpleaños de Severiano Ballesteros?
—Eso y entrar en el grupo de mis dos ídolos, que son Seve Ballesteros y Olazábal, es un orgullo. Chema me mandó un mensaje diciéndome lo mucho que confiaba en mí y que tenía que creer en mí mismo, tener calma y no dejar que nada me desestabilizara.
—Eagle en el hoyo 15, como Olazábal en 1994... —Desde la calle no sabía si había tocado la bandera o dónde fue, pero luego tiré uno de los mejores putts de la semana. —Hubo mucha deportividad entre usted y su rival, Rose. —Todo el mundo quiere ganar, pero somos personas que representamos a este deporte y debemos estar a la altura. Somos amigos y nos tenemos mucho respeto. Nos animamos el uno al otro, no queríamos que ninguno perdiera.
—Por fin el Masters. ¿Había perdido la esperanza? —Muchas veces, desde que vine en 1999 como amateur, sentí que este campo me iba a dar por lo menos un grande. Luego no me encontré tan bien a lo largo de los años, no estuve cómodo. Pero en los últimos tiempos, con ayuda, empecé a aceptar lo que Augusta te da y te quita, y esta vez lo comprendí mejor. Y todavía tengo mucho margen de mejora.
—¿Cree que su triunfo impulsará al golf en España? —Espero que esta victoria ayude al golf español. El tiempo dirá como reacciona la gente.