El elefante que pisó a la hormiga

El Real Valladolid es un equipo de Primera División por derecho propio y en cada partido da lo que tiene y echa de menos lo que no tiene, que es el gol. Que un elefante medio dormido pise a una hormiga que intenta recolectar semillas con su mejor voluntad, es lo más normal, pero no se ríe de ella. Algunos son como Buzz Lightyear y cito ‘hasta el infinito y más allá’ si miramos a su presupuesto para confeccionar la plantilla, mientras que otros, como el Pucela, tienen que apañarse con 23 millones de euros, una minucia comparado con lo que cobra Messi, por ejemplo. Las derrotas de los grandes son por sus deméritos y nunca por lo que hace bien el rival. El Valladolid ha plantado cara en cada duelo con los grandes, tanto en el Bernabéu como en el Camp Nou, aunque lo que quedará es que perdió.

Martínez Munuera, ¿cómo es posible que un agarrón hacia atrás, mande a un jugador hacia adelante? Ya, apreciación. Lo de siempre. Eso sí, algunos están agazapados, como comadrejas, esperando que salgan las cosas mal. Ya ven al equipo descendido y afilan los cuchillos en busca de culpables, es lo que les gusta, rebozarse en el barro. No sé lo que va a pasar, pero por el camino disfrutaremos y sufriremos... y si bajamos, volveremos a empujar para subir. Valoremos lo que hay y apoyemos a Sergio.