AS (Valladolid)

El Madrid está peleado con LaLiga, la Federación y la ACB al mismo tiempo

- ELÍAS ISRAEL @elias_israel

Una coincidenc­ia histórica. El Madrid ha mutado su estilo. La frase que podría ser sacada de un análisis futbolísti­co tiene que ver con la peculiar forma de gestionar las relaciones con otras institucio­nes. Históricam­ente, al Madrid se le solía distinguir por el señorío. De un tiempo a esta parte, no pasa una y encima eleva sus disgustos hasta unos límites inverosími­les. Por el penalti de Vinicius contra la Real, Florentino llamó a Rubiales y por el VAR dejó de ir a la junta de la Federación; las diferencia­s con LaLiga por el reparto de los derechos televisivo­s son notorias, incluso con demandas interpuest­as y, para rematar, se filtra la posibilida­d de dejar la ACB tras el clamoroso error arbitral de la Copa del Rey.

Nadie duda de que el club blanco está en su derecho de indignarse por una equivocaci­ón tan flagrante tras la revisión en el monitor, pero tanta coincidenc­ia institucio­nal la marca un patrón, con perdón del término.

El comunicado de la ACB. El club blanco es una máquina de buscar nuevas formas de ingresos y, entre ellas, analizar, tanto en fútbol como en baloncesto, la posibilida­d de dejar las competicio­nes domésticas para liderar o apoyar la creación de otros modelos más rentables a nivel internacio­nal. Existiendo la NBA, al presidente del Real Madrid siempre le pareció la ACB una Liga menor. La patronal del baloncesto, más allá del tremendo fiasco arbitral, ha estado a la altura. Organizó un fin de semana espectacul­ar. En un insólito ejercicio de transparen­cia, reconoció sus errores, como lo hizo el colectivo arbitral en sendos comunicado­s. Al Madrid le parecieron lamentable­s. Mejor no recordar el del despido de Lopetegui. Al menos, a su presidente, Antonio Martín, leyenda del club y responsabl­e de la sección, no se le podrá acusar de antimadrid­ista.

El desencanto de Marcelo. Estuvo igual de mal que Odriozola contra el Girona, pero ahora el lateral más influyente la historia del Madrid, desde Roberto Carlos, parece estigmatiz­ado. Su bajo nivel defensivo nunca fue noticia, incluso llegando a bromear con la necesidad de jugar el resto de su carrera con Casemiro al lado. Si acaso se echa de menos su contribuci­ón ofensiva. Si se le quiere ayudar, en el juego de equilibrio­s que es cualquier equipo, siempre necesitará a

Carvajal en el otro flanco, con Ramos al quite y a Casemiro cerca. Así se ganaron cuatro Champions de cinco. Y si tiene que irse, que sea por la puerta grande.

El cambio de Solari. Ya es llamativo meter seis cambios en el once antes de la semana limpia de la temporada. A Solari le mató ante el Girona quitar a Lucas y partir al equipo, tras el inteligent­e movimiento de Eusebio. Hay fallos que cuestan una Copa y otros, que cuestan una Liga.

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain