Un mal rival para rematar un buen año
El Madrid conquistará hoy su 34ª Liga si se impone al Villarreal, que ganó en sus últimas cuatro salidas
Dos partidos, dos puntos, dos match-balls. Una cuenta sencilla que puede darle al Real Madrid esta noche su 34ª Liga si le gana al Villarreal en el Di Stéfano. A la vista de la clasificación, el partido con más cuesta para los de Zidane. A la vista de los sucedido tras el parón, también. El equipo de Calleja ha ganado en sus últimas cuatro salidas, con un solo gol en contra.
Como el Madrid, tuvo una salida de purasangre en la pospandemia, con 16 puntos de 18 posibles, pero las derrotas en casa ante Barcelona y Real Sociedad le dejaron fuera de la Champions. Sus cuentas también son sencillas: un punto le mete en Europa League y tres le libran de la séptima plaza, que carga en la mochila tres rondas previas. La cuestión es si Javi Calleja se lanzará a tumba abierta a por el partido o si guardará piezas clave para el domingo, ante el Eibar, un duelo más sencillo y ante un adversario libre de pecados y de objetivos.
Calleja podría reservar a Cazorla, ese milagro de la ciencia que al acabar el curso se marchará con Xavi al Al Sadd catarí. Cazorla ha metido quince goles, once en la Liga. Sólo en su primer año en el Arsenal, en la plenitud de su carrera, fue más productivo. También Gerard Moreno ha estado en el pico más alto. Con 16 tantos, es el pichichi nacional. Si marca alguno más firmará su Liga más anotadora, incluyendo la última con el Espanyol, que fue la que le trajo de vuelta al Villarreal. Ha intervenido en 30 dianas, el 52% de todas las de su equipo.
En términos ofensivos, el cuadro de Calleja es la tercera artillería de LaLiga (58 goles). También en el juego de elaboración (42 tantos en jugada), pero pierde bastante atrás y en el balón parado.
En la previsión de hoy esta el regreso a la titularidad de Chukwueze y la duda de Raúl Albiol, con cuatro tarjetas y apercibido. Arriba le faltarán Alcácer y Bacca.
En el Madrid, Ramos espera alzar su 22º título con el Madrid y Benzema, el 19º. Once de ellos habrán llegado con Zidane en menos de cuatro años. Son los tres personajes de LaLiga. El francés podría incluso ser pichichi después de haber marcado en todos los meses de competición. Esa regularidad con el gatillo (19 goles) fue desconocida durante sus primeros nueve años en el Madrid.
Zidane se acercará mucho al equipo de gala, con sus nueve fijos y dos plazas abiertas en función del rival y del dibujo. Valverde podría ser el cuarto centrocampista. Y cabría incluso un quinto, con Isco, pero parece más probable que en la izquierda tire de Asensio o Vinicius. El brasileño es aún futbolista de quita y pon. Ha sido suplente o no ha jugado en seis de los nueve partidos tras el parón y dista mucho de convertirse en pieza indispensable para el francés.
A la lista vuelve Jovic, que entre lesiones y aislamientos ha tirado la segunda parte de la temporada. También se le fue el tren de antes del parón. En las mismas está Bale. Zidane avinagró su tono al ser preguntado por él. Pretende el francés darle normalidad a la reiterada suplencia (100 minutos en los nueve últimos partidos) del jugador más caro del equipo. Habrá ganado la Liga sin él (no marca en la competición desde el 1 de septiembre, curiosamente ante el Villarreal) y sin los dos que le siguen en el ránking, Hazard y James, ausentes también en el tramo decisivo. Ahora costará poner en el mercado al galés y al colombiano, pero para Zidane no hay mejor política de club que ser campeón.
Villarreal Necesita un punto para ir a Europa League y tres para evitar rondas previas