La ‘vieja guardia’ del Bayern desprecia al Barça
El vestuario culé “toma nota”
Que el Bayern de Múnich es un equipo orgulloso que roza la prepotencia no es una novedad. Su lema oficial es “mia san mia”, que traducido vendría a ser “somos lo que somos”, pero en un tono desafiante al que perfectamente se le podría añadir “y si no te gusta te aguantas”. El otro lema, el oficioso, que lucen muchos aficionados en sus pancartas o en bufandas en el Allianz Arena es el de “vuestro odio es nuestro orgullo”. Así son. Los del Bayern pecan de suficiencia y el Barça lo está empezando a notar. Saben que no caen bien al resto de equipos, especialmente en Alemania donde o se es del Bayern o se odia al Bayern, pero les trae sin cuidado. Por eso actúan como actúan. Pisando callos por donde van. Esta vez, le toca al Barcelona.
La vieja guardia del equipo alemán está empezando a calentar el partido de cuartos de final del próximo viernes con sus declaraciones de desprecio al Barcelona, que están sirviendo para motivar al vestuario barcelonista.
No se trata de una táctica que parta del vestuario de
Hans Flick, que es un técnico bastante alejado a esta tradicional imagen petulante y soberbia del conjunto bávaro, pero a ciertos personajes como Lothar Matthäus, Giovanni Elber o Karl Heinz Rummenigge les cuesta ir contra su naturaleza. Son de generaciones en las que para jugar en el Bayern había que liarla en la sala de prensa. El Real Madrid
puede dar buena fe de ello con declaraciones antes de cada enfrentamiento con los bávaros de esos mismos protagonistas o de gente como Oliver Khan, Effemberg, Augenthaler o Salihamidzic. Verdaderos apóstoles de la diplomacia futbolística.
Matthäus ya dijo el día en el que ambos equipos confirmaron su pase a cuartos que “el Bayern debería equivocarse mucho para perder ante este Barça” y al día siguiente añadió que “Messi se enfrentará al mejor del mundo:
Lewandowski, que no es sólo el mejor delantero del mundo, es el mejor jugador y el sucesor de Messi”. Palabras que ayer ratificó Giovanni Elber,
otro clásico.
Por su parte, Rummenigge comparó a Ter Stegen con Neuer y consideró que su guardameta “es de talla mundial y el del Barcelona va camino de serlo”. Una polémica que sacude Alemania donde desde diversos ámbitos se debate sobre si el portero del Bayern debería darle ya el relevo al del Barcelona en la selección alemana. Tal es la polémica, que incluso cuando se rumoreaba que Löw podría cambiar de portero, Uli Hoeness,
máximo ejecutivo del Bayern y otro que cada vez que habla sube el pan, amenazó con retirar a los jugadores del Bayern del equipo nacional si el relevo se producía.
El vestuario del Barça es consciente de esos mensajes que, como siempre pasa en estos casos, sirven de motivación extra para partidos en los que no hace falta motivarse. Mundo Deportivo, en su edición de hoy, explica que desde el vestuario culé se han dado por enterados de estas palabras y “toman nota” del “mia san mia” bávaro.
Habitual Provocación y orgullo siempre han sido una de las marcas del Bayern