Orgullo en Sevilla
Séptimo triunfo seguido culé fuera ● Pedri y Araújo, lesionados ● El Sevilla, nulo en ataque
concentración o de si a Lopetegui le funcionarían los cambios tácticos que exigía el partido.
No se hizo esperar la modificación del técnico sevillista. Entraron tras el descanso Rekik, Suso y En Nesyri. Más allá del cambio de hombres, el Sevilla aceptaba el envite del Barça y pasaba a jugar también con tres centrales.
Pero el Barça no sólo aguantó el tipo, sino que tuvo ocasiones para ampliar su ventaja: Dest disparó al palo tras una gran jugada colectiva y un minuto después Messi desperdiciaba un balón que le sirvió en bandeja Dembélé tras otra cabalgada sensacional.
Lopetegui necesitaba otra vuelta de tuerca y gastó los dos cambios que le quedaban introduciendo a Óliver Torres y Óscar. Koeman sólo movió el banquillo a falta de 25 minutos retirando a Piqué, aún en rodaje, para que reapareciera Ronald Araújo. Cinco minutos después se vio obligado a retirar a Pedri, lesionado, para dar entrada a Ilaix.
En el último tramo del partido, el Sevilla volvió a achuchar al equipo blaugrana, al que le crecieron los enanos cuando Araújo se resintió de su lesión en el tobillo izquierdo. Había durado 16 minutos sobre el campo. El Sevilla apretaba, el Barça, sufría con un equipo ya de circunstancias sobre el campo que le dio sus frutos con el segundo gol, tan agónico como era el partido, de Leo Messi tras apoyarse en Ilaix. El partido estaba sentenciado. El Barça mantenía su orgullo y dice que no se rinde.