Semana clave para activar la operación salida y reforzarse
Vargas, muy cerca de irse cedido
Totalmente maniatado a causa del límite salarial en negativo, el Espanyol espera cortar esa cadena la próxima semana. La intención de la dirección deportiva es la de dar salida a tres o cuatro futbolistas que tienen ofertas con tal de recortar esos 3-4 millones (según el club) que separan a la entidad blanquiazul de cuadrar el coste de la plantilla. Operaciones que, eso sí, no serán fáciles, pero que darían luz verde a los primeros refuerzos.
Uno de esos futbolistas es Matías Vargas, que cuenta con una propuesta del Leganés pero que no encaja en lo que pretende el Espanyol, teniendo en cuenta que la prioridad es que los clubes de destino asuman la totalidad de la ficha o incluso puedan compensar económicamente al Espanyol. Todo ingreso será un alivio. El argentino también tiene otras propuestas en el extranjero que podrían cuadrar mejor en lo que pretende el club.
Al margen de Vargas, hay otros jugadores como Dídac Vilà, que tiene sobre la mesa una oferta del Eibar que también es de su agrado; el propio Víctor Gómez, por quien el club vería bien una venta que podría desatascar; o incluso Álvaro Vadillo, jugador sobre el que Francisco Rufete declaró que una cesión podría ser lo más apropiado, que entrarían en las siguientes operaciones. No se descartan otro tipo de movimientos.
Ahora mismo, el Espanyol no puede incorporar a las que considera sus primeras opciones y corre el riesgo de que se le escapen por la paralización. Tampoco quieren utilizar la norma por la que pueden gastar el 25% de lo ahorrado después de un movimiento aunque estén excedidos del límite, ya que por esa cantidad será difícil contratar a jugadores prioritarios.
Descartes Vadillo, Víctor Gómez y Dídac también figuran en la lista