La G League, una opción para Garuba
En Houston priorizan que el español acumule minutos para su adaptación
Usman Garuba prepara, con 19 años, su debut en la NBA con Houston Rockets, el equipo que lo eligió con el número 23 del pasado draft. Y uno que pasó de ocho años seguidos en playoffs, muchos como aspirante al anillo, a ser la peor franquicia de toda la Liga (solo 17 victorias el pasado curso). En plena reconstrucción tras la salida de James Harden y Russell Westbrook, los texanos se centraron en un draft 2021 en el que eligieron a cuatro jugadores en primera ronda: Jalen Green (número 2), el pívot turco Alperen Sengun (16), Garuba (23) y Josh Cristopher (24).
Garuba llega con un gran cartel a la NBA. Un jugador joven pero que ya fue importante con el Real Madrid la temporada pasada, en la que además disputó los Juegos Olímpicos con España. Uno cuyas posibilidades defensivas gustan mucho al otro lado del Atlántico, donde creen que se ajusta a la perfección al estilo de pívots defensivos (rápidos y polivalentes) que mejor se adaptan el estilo actual de la NBA, un baloncesto de espacios, circulación constante y tiro exterior.
Pero eso no le va a asegurar, no al menos nada más aterrizar, tiempo en pista con los Rockets. El español tendrá oportunidades en un equipo que no aspira a nada que no sea desarrollar su talento joven, pero todo apunta a que también le va a tocar pasar tramos de temporada en Rio Grande Valley Vipers, el equipo afiliado de los Rockets en la Liga de Desarrollo (G League). Una competición secundaria que las franquicias NBA utilizan sobre todo para dar espacio a los jugadores muy jóvenes o a aquellos que se han quedado sin un lugar claro en la gran Liga.
Así lo advierte Jonathan Feigen, periodista del Houston Chronicle y una de las voces más autorizadas para hablar de Houston Rockets. Feigen ha explicado que la franquicia prefiere que sus jóvenes tengan minutos en la G League en vez de pasar demasiado tiempo en los banquillos de la NBA.
Feigen tiene claro que Jalen Green, el nuevo jugador franquicia, jugará. Y cree que Sengun está ya lo suficientemente pulido en ataque para aportar. Pero considera que Garuba y Cristopher tienen todavía aprendizaje pendiente: “Es un proceso. Los Rockets no te degradan enviándote ahí. Al contrario, es una forma de trabajar con jóvenes a los que valoran mucho. Garuba necesita tiempo. Defensivamente tiene todo el talento del mundo, pero en ataque está muy verde. Necesita minutos. A un jugador así no le valen tramos de cuatro minutos en cada parte con los Rockets, le va mucho mejor jugar 34 cada noche con los Vipers. Estar en forma, listo”.